Agencias | En el pasado sexenio, encabezado por el expresidente Enrique Peña Nieto, fueron asesinadas 473 personas lesbianas, gays, bisexuales y trans por motivos relacionados con el odio hacia su orientación sexual o/e identidad de género.
Estos datos fueron revelados por el informe “Violencia Extrema. Asesinatos de personas LGBT en México: los saldos del sexenio (2013-2018)”, elaborado por la organización civil Letra S. De acuerdo con el informe, de este periodo analizado, 2017 y 2018 fueron los más violentos, pues se registró un aumento del 30% en los homicidios con relación a años anteriores.
Por otro lado, en lo que va de 2019 se han registrado 28 asesinatos de personas LGBT, además, según explicó Alejandro Brito, director y fundador de Letra S, si la tendencia continúa se estima que haya una alza en el número de este tipo de homicidios.
Las mujeres trans son el grupo con mayor vulnerabilidad, pues según el informe, en los últimos seis años se registraron 261 asesinatos de mujeres transgénero, cantidad que representa el 55% del total de crímenes reportados; seguidas de los hombres gays con 192 casos, que representan el 40%.
También se documentaron los asesinatos de 9 mujeres lesbianas y una mujer bisexual; así como los homicidios de cinco hombres bisexuales. Se estima que el número real de crímenes de odio sea superior, ya que los datos del informe se basan en datos periodísticos y muchos crímenes de odio pasan desapercibidos.
Algunos datos reveladores que ofreció la investigación son que el promedio de edad de las víctimas es de 32 años y que incrementaron los asesinatos de defensores de derechos humanos LGBT y de mujeres trans.
El estado que aglomera la mayor cantidad de crímenes de odio es Veracruz (43 asesinatos); seguido de Guerrero (39) Quintana Roo (33), Estado de México (30), Chihuahua (28) Puebla (27) y Tamaulipas (25).
El documento señala que hay un patrón en los asesinatos, pues mientras que la mayoría de los cuerpos de hombres gays fueron encontrados en sus domicilios con heridas generadas por punzocortantes o asfixiados; las mujeres trans son halladas en baldíos y heridas con armas de fugo.
La organización puntualizó que paras las autoridades los casos que involucran la identidad de género y la orientación sexual tienen poca relevancia; además las investigaciones se ven afectadas por los prejuicios.
Según la investigación, sólo en 10% el crimen de odio se menciona como posible línea de investigación; a la vez que impera el el estereotipo del “crimen pasional”.
Debido a este contexto, Letra S exhortó a la Fiscalía General de la República a (FGR) a crear un Registro Nacional de Incidencia Delictiva en contra de personas LGBT; así como la homologación del tipo penal de “crímenes de odio”.
Con información de La Jornada.
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