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Alrededor de 460.000 menores de edad han sido reclutados por las bandas del narcotráfico en México.
Así lo reconoció Alfonso Durazo, quien ha sido nombrado como el próximo secretario de Seguridad Pública dentro del gobierno del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, durante el Foro Escucha realizado en la ciudad de Saltillo, Coahuila. Actos públicos con los que el gobierno entrante busca articular una estrategia común para pacificar el país.
«Diversas organizaciones sociales estiman que hay en el país alrededor de 460.000 niños ‘halcones’, armados hasta los dientes, y yo les digo a ustedes que no podemos dejar a esos niños como horizonte de vida una vida de criminalidad», dijo Durazo.
Los ‘halcones’ son regularmente menores de edad que se sitúan como vigías en puntos estratégicos y que notifican a los líderes locales de los cárteles de la droga sobre lo que ocurre en zonas específicas del territorio donde operan las organizaciones criminales.
«No podemos dejarlos así. No podemos ofrecerles como horizonte de vida una vida de criminalidad. Tenemos que rescatarlos», agregó el político a través de su cuenta de Twitter.
En noviembre de 2017, tras una gira de 10 días por México, la Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, Victoria Tauli-Corpuz, declaró estar «particularmente preocupada» por la manera en que los menores de edad, sobre todo indígenas, son reclutados por la fuerza para integrarse a las bandas criminales.
«En zonas afectadas por el crimen organizado y la producción y tráfico de drogas, la única elección que les queda a los jóvenes es unirse a estos grupos o ser torturados, desaparecidos o asesinados», alertó Tauli-Corpuz.
