El exlíder del Cártel del Milenio confesó haber realizado múltiples pagos millonarios a García Luna a cambio de protección y colaboración en el trasiego de drogas
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Arrancó la segunda semana de audiencias en el juicio contra Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública, quien es acusado de haber colaborado con el Cártel de Sinaloa durante más de una década.
En el cuarto día de alegatos subió al estrado de la Corte de Brooklyn Óscar Orlando Nava Valencia, alias “El Lobo”, para participar como testigo en contra del exfuncionario.
Una de sus declaraciones más destacadas fue la supuesta entrega de sobornos millonarios (a los que se refirió como “arreglos”) a García Luna como parte de los acuerdos del grupo criminal con el gobierno mexicano.
Según su testimonio, “El Lobo” —exlíder del Cártel del Milenio— hizo un primer pago al “super policía” en 2006 por 2,5 millones de dólares como parte de una colecta ordenada por Arturo Beltrán Leyva a los altos mandos de La Federación (una alianza conformada por cárteles como el de Sinaloa, los Beltrán Leyva y el de Juárez).
Al año siguiente, “El Lobo” le habría pagado personalmente la suma de 10 millones de dólares a García Luna a cambio de protección y de la liberación de un cargamento de más de 20 toneladas de cocaína.
La droga había sido decomisada por personal de la Marina en Manzanillo, Colima, en lo que se conoció uno de los mayores aseguramientos de narcóticos en la historia de México hasta ese entonces. La cocaína procedía de Colombia y se presume que una mitad le pertenecía a Nava Valencia y la otra a Arturo Beltrán Leyva.
Para evitar un cobro de hasta 50 millones de dólares por parte de sus socios colombianos, los líderes criminales habrían acudido a García Luna.
Sin embargo, durante su comparecencia en la Corte de Brooklyn, “El Lobo” fue duramente cuestionado por los abogados del exsecretario de Seguridad y confesó que en múltiples pláticas que tuvo con personal de la Administración de Control de Drogas (DEA) entre 2010 y 2020, nunca había mencionado a García Luna al hablar de sus operaciones delictivas.
Según lo reportado por los periodistas Ángel Hernández y Juan Alberto Vázquez para Milenio, la defensa legal de García Luna le preguntó a Nava Valencia si al hablar previamente de la corrupción en el gobierno mexicano y sus nexos con el narcotráfico nunca se le había ocurrido mencionar al entonces secretario de Seguridad Pública.
“Es que hubo temas que no se tocaron a fondo”, fue la respuesta del “Lobo”.
—Usted dijo que había sobornado al secretario de la Defensa, Guillermo Galván Galván, pero no se acordó de mencionar a García Luna —mencionó Florian Miedel, defensor del exmando de seguridad.
—En ese tiempo no hubo oportunidad —refirió “El Lobo” en un intento por no claudicar ante los debates del litigante.
Otros periodistas que siguieron el juicio desde la Corte también refirieron que el miedo a cualquier tipo de represalias fue otro argumento expuesto por “El Lobo” para no haber mencionado antes a García Luna durante sus años de colaboración con el gobierno de Estados Unidos.
De los testigos que han participado en el juicio de García Luna hasta el momento, “El Lobo” fue el segundo que declaró haber conocido personalmente con García Luna.
Previamente, Sergio Villarreal Barragán, alias “El Grande”, expresó que Arturo Beltrán Leyva (a quien se le conoce también como “El Botas Blancas”) se habría reunido con García Luna en al menos 20 ocasiones para la presunta entrega de sobornos millonarios, encuentros en los que él mismo había estado presente.
Óscar Nava Valencia asumió el liderazgo del Cártel del Milenio luego de la detención de su tío Armando Valencia Cornelio, alias “El Juanito”, en agosto de 2003.
“El Lobo” y su hermano Juan (”El Tigre”) estaban a cargo de la planeación y el tráfico de cocaína desde varios países de Centro y Sudamérica que arribaban al puerto de Manzanillo. El hoy testigo colaborador contra García Luna fue detenido en octubre de 2009 y extraditado a EEUU en enero de 2011.
Tres años más tarde, en 2014, fue sentenciado a 25 años de prisión por su participación en el trasiego de más de tres toneladas de droga desde Panamá.