Cuánto gastó la Sedena en crear el fusil FX-05 que ahora también usa el narco

Desde que se produjo el primer lote, la corporación ha fabricado más de 200 mil de estos rifles

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Durante el Desfile Militar de 2006, ya con Felipe Calderón Hinojosa como presidente electo de México, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) presentó la que se convertiría en su arma insignia: el fusil FX-05 Xiuhcóatl.

Este rifle de asalto recibe su nombre de la mitología mexica, pues Xiuhcóatl es el náhuatl para “serpiente de fuego” y alude al arma viviente que empuñó Huitzilopochtli para matar a sus 400 hermanos y consolidarse como el dios del Sol.

La creación del FX-05 de la Sedena, según información disponible en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), estuvo sustentada en tres aspectos que el Ejército deseaba cubrir: reducir costos de fabricación de municiones, incrementar el volumen de fuego y otorgar superioridad táctica a sus elementos.

Acorde con detalles proporcionados por la corporación, la fabricación de su propio fusil de asalto permitía un ahorro de 20 mil 826 pesos por pieza, pues sustituía la opción de comprar artefactos de empresas extranjeras.

El rifle insignia del Ejército ha sido localizado en manos de sicarios. (Infobae México/Jovani Pérez)

Sin embargo, la inversión para que el FX-05 comenzara a producirse no fue menor. En respuesta a una solicitud de información de 2009, la Sedena detalló:

“Para la investigación y desarrollo de los primeros prototipos del Fusil FX-05 Xiuhcóatl se destinó un monto aproximado de tres millones 599 mil 38 pesos”.

El mecanismo de disparo de este fusil está registrado ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) desde el 14 de septiembre de 2006 bajo el folio PA/A/2006/007961.

Los documentos oficiales refieren que los inventores del mecanismo son Luis Adrian Zúñiga Avilés y Álvaro Gayoso Vargas. La patente fue solicitada cuando Juan Alfredo Oropeza Garnica era el titular de la Dirección de Industria Militar y el secretario de Defensa era Clemente Ricardo Vega García —fallecido en 2022—.

Tuvieron que pasar casi cinco años para que el IMPI concediera la patente solicitada para el mecanismo de disparo de este rifle, cuando el director de Industria Militar era Evodio Aquino Maldonado.

La llegada del arma a grupos criminales preocupa a los agentes de seguridad. (DANIEL AUGUSTO/CUARTOSCURO)

Reportes proporcionados a Infobae México por la Sedena refieren que en el año de su lanzamiento, la institución produjo cinco mil piezas del FX-05. Para finales de 2009 ya se habían fabricado 32 mil 850 fusiles en total.

Desde la salida del primer lote hasta finales de 2022, la Dirección de Industria Militar fabricó 212 mil 350 unidades. El año más prolífico en este sentido para la Sedena fue 2021, pues de sus talleres salieron 36 mil piezas del FX-05.

Hasta abril de 2023, esta dependencia tenía registro de 15 fusiles robados y no localizados, algunos de los cuales han sido vistos en manos de sicarios a través de redes sociales.

Uno de ellos, por ejemplo, fue utilizado por miembros del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) durante una agresión contra la Guardia Nacional en Morelia, Michoacán. Aunque informes de la Sedena han reconocido que algunos agentes han puesto a la venta sus propias armas desde el Campo Militar Número 1, se desconoce en qué circunstancias el resto de los fusiles habrían llegado a manos del crimen organizado.