El consumo de bebidas alcohólicas adulteradas puede ocasionar nauseas, vómito, dolor de cabeza y, en casos graves, ceguera, daños hepáticos e incluso la muerte
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El fin de 2023 está a la vuelta de la esquina y con ello se aproxima una de las fiestas decembrinas más esperadas. En Año Nuevo, millones de familias mexicanas se reunirán para dar la bienvenida al 2024 con deliciosos platillos y, en la mayoría de los hogares, algún tipo de bebida alcohólica. Es por ello que las y los consumidores deben tomar precauciones y cerciorarse de no poner en riesgo su salud y la de sus seres queridos a través del consumo de alcohol adulterado. Aquí te explicamos cómo identificarlo.
Al igual que en ocasiones casuales y otras festividades, es importante que antes de comprar una bebida alcohólica se verifique que el artículo en cuestión cumpla con todas las medidas de seguridad o, de lo contrario, podrían presentarse complicaciones médicas graves.
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), una bebida alcohólica adulterada es aquella a la que se le adicionan compuestos químicos, como etanol y metanol, con el objetivo de reducir los costos de producción e incrementar los de venta.
Dado que se trata de una intervención clandestina, las bebidas que son alteradas carecen de reglas sanitarias y de salubridad, por lo que pueden provocar dolor abdominal, dolor de cabeza, náuseas y vómito en aquellas y aquellos que las consuman. En los casos más graves se puede ocasionar ceguera, daños en el hígado e incluso causar la muerte.
En esa línea, la Secretaría de Salud (SSa) también recomienda no consumir bebidas alcohólicas artesanales debido a la falta de vigilancia. “(…) Una destilación no realizada conforme a la Norma puede ocasionar daños crónicos al sistema renal y al hígado, y una mala destilación puede poner en riesgo tu vida”, indicó.
Aunque la adulteración, falsificación, contaminación y alteración de alimentos, bebidas no alcohólicas o cualquier otra sustancia o producto de consumo humano es considerado como un delito grave y puede ser castigado desde seis meses a nueve años de prisión ―dependiendo de la gravedad de la acción―, hay quienes aún lo realizan y lo ofertan de manera pública.
Por ejemplo, en vísperas de Nochebuena se hizo viral una publicación de Facebook en la que un habitante de Jalisco oferta galones con supuesto tequila Don Julio y Herradura. La bebida alcohólica era vendida a 750 y mil pesos, precio menor al oficial.
Paso a paso: así puedes evitar las bebidas alcohólicas adulteradas
De acuerdo con un comunicado del sitio oficial del Gobierno de México, estas son las medidas de seguridad que debes implementar para comprobar que la bebida alcohólica que deseas comprar no haya sido adulterada:
- Verificar que la tapa de la botella no gire o escurra contenido.
- Comparar junto a otras botellas que el llenado sea exactamente el mismo. Las autoridades refieren que un proceso manual no tiene tanta precisión.
- Gira la botella y regrésala a su posición original y nota cómo suben burbujas, si ves partículas que caen, se trata de un producto que no fue elaborado con suficiente calidad e higiene.
- La etiqueta no debe de poder quitarse con facilidad y debe de estar bien pegada. La mayoría de las empresas tienen un sistema de pegado horizontal que impiden su retiración.
- Verifica que las etiquetas no estén sobrepuestas a otras. Deben contar con relieves que sean accesibles al tacto.
- Revisa que el marbete sea auténtico. Tal como Infobae México lo informó, esta pequeña etiqueta debe de ser incluida por los contribuyentes del Sistema de Administración Tributaria (SAT) dedicados a la producción, fabricación, comercialización e importación de bebidas alcohólicas,
Adicionalmente, se recomienda comprar bebidas alcohólicas únicamente en establecimientos que emitan factura o nota de compra. Si el precio en el que se oferta difiere mucho entre una tienda y otra, ten cuidado y verifica minuciosamente cada uno de los puntos.
Por su parte, la SSa recomienda destruir las botellas vacías con el fin de que lleguen al mercado negro. “Al hacerlo lograremos terminar con el negocio informal de la venta de alcohol adulterado”, apuntan.