Lamentable imagen
A lo largo de la franja hotelera y turística de Puerto Vallarta, lamentablemente se observa la imagen de la suciedad que hay en las cajas de luz y transformadores.
Muestra de la falta de cultura, educación de muchas de las personas que viven en este destino turístico de playa.
A lo largo de la avenida principal de Puerto Vallarta, conocida por ser una franja turística y hotelera emblemática, se vislumbra una imagen lamentable que contradice su reputación de destino de clase mundial.
Entre las luces brillantes de las cajas de luz que adornan las fachadas de los establecimientos y los transformadores que se alzan junto a ellas, se encuentran montañas de basura acumulada.
Este contraste entre la belleza superficial y la realidad descuidada crea una sensación de discordia visual que empaña la experiencia de quienes transitan por esta zona tan transitada.
Las cajas de luz, que deberían servir como llamativos anuncios que atraen a los visitantes y residentes por igual, se ven eclipsadas por la presencia abrumadora de desechos y desorden a su alrededor.
En lugar de transmitir una imagen de limpieza y cuidado, estas estructuras se convierten en testigos mudos de la falta de mantenimiento y atención hacia el entorno urbano.
Esta situación no solo afecta la estética del lugar, sino que también proyecta una impresión negativa sobre la comunidad y su compromiso con el cuidado del medio ambiente.