Espectáculo visto por gente local, visitantes nacionales e internacionales
Para mucha gente local, visitantes nacionales e internacionales es lamentable el espectáculo que se aprecia en avenida de ingreso, Francisco Medina Ascencio afuera de las instalaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social número 42, montañas de basura en las banquetas.
El problema de la pésima imagen persiste en cada rincón del municipio vallartense, ciudadanos a la espera de soluciones integrales al problema de la basura.
La ciudadanía de Puerto Vallarta ha expresado su profunda preocupación por la acumulación de basura en las banquetas de la avenida Francisco Medina Ascencio, una de las principales vías de ingreso a la ciudad.
Las grandes cantidades de desechos apilados en las aceras no solo afectan la imagen urbana, sino que también representan un riesgo para la salud pública, al ser focos de malos olores y atracción de fauna nociva.
Esta problemática ha sido señalada por residentes y turistas, quienes consideran inaceptable que la entrada a un destino turístico de gran renombre se vea afectada por estos residuos.
A través de redes sociales y medios locales, la denuncia ciudadana se ha hecho eco, exigiendo a las autoridades municipales una solución efectiva y constante.
Los testimonios de los ciudadanos reflejan una frustración generalizada ante lo que consideran un problema recurrente, que parece agravarse en temporadas de mayor afluencia turística.
Los desechos obstruyen el paso de peatones, especialmente de aquellos que dependen de banquetas accesibles para su movilidad, y proyectan una imagen descuidada y poco higiénica de la ciudad.
La comunidad pide a las autoridades locales la implementación de un plan de limpieza integral y la instalación de contenedores adecuados para evitar la acumulación de residuos en las banquetas.
También proponen campañas de concienciación que promuevan la responsabilidad ciudadana en el manejo de la basura, para que tanto locales como visitantes contribuyan al cuidado del entorno.
Esta denuncia es un recordatorio de la importancia de mantener un ambiente limpio y ordenado en una ciudad que depende en gran medida de su atractivo turístico y de la hospitalidad de sus espacios públicos.