El Salado, el único manglar urbano protegido en Latinoamérica, cumple cinco años como parque estatal. Pese a su valor ecológico y su importancia para el ecosistema de Puerto Vallarta, el sitio enfrenta amenazas como incendios, contaminación y abandono.
Agencia Jafrico | NoticiasPV
El Salado, ubicado en Puerto Vallarta, cumple cinco años de haber sido declarado Parque Estatal, luego de que el 12 de marzo de 2020 fuera decretado como Área Natural Protegida (ANP) de carácter estatal bajo la denominación de Parque Estatal Estero El Salado. Sin embargo, este ecosistema de gran valor ecológico enfrenta múltiples desafíos que ponen en riesgo su conservación.
El Salado es el único manglar urbano protegido en Latinoamérica y un espacio clave para la conservación de los servicios ecosistémicos que benefician a la sociedad vallartense. El primer decreto como área natural protegida fue resultado de una intensa lucha por parte de la comunidad, biólogos y conservacionistas que lograron impedir su devastación.
Con poco más de 209 hectáreas, el estero alberga cuatro tipos de ecosistemas: selva subcaducifolia, manglar, bosque espinoso y marisma o pastizal. Además, se han registrado alrededor de 134 especies de aves, 28 de anfibios y reptiles, 29 de mamíferos y una rica variedad de insectos. Este ecosistema también actúa como un filtro natural, capturando dióxido de carbono y regulando el flujo de agua hacia la bahía.
Helios Hernández Hurtado, líder del grupo interdisciplinario que recientemente se integró a los trabajos en El Salado, destacó la importancia biológica de este espacio. «Los manglares soportan los embates de la naturaleza, como huracanes, y actúan como un gran riñón, filtrando el agua y devolviéndola con nutrientes al mar y a la bahía», explicó. También señaló que la presencia de cocodrilos en el área es indicio de un equilibrio saludable en la cadena alimenticia.
Pese a su valor ecológico, El Salado ha enfrentado años de abandono, incendios, contaminación por aguas negras y la constante amenaza de proyectos inmobiliarios. A pesar de estos desafíos, el ecosistema ha logrado mantenerse en pie.
Actualmente, la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) ha retomado el proyecto de conservación para fortalecer este sitio natural. No obstante, el parque aún no está completamente habilitado para su disfrute público, ya que las lanchas para recorrer los manglares carecen de permisos y algunas áreas rehabilitadas con recursos por 34 millones de pesos en la administración pasada siguen sin estar abiertas al público.
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