Por Paty Aguilar
Indolente el OROMAPAS y el alcalde de Bahía de Banderas, José Gómez Pérez, quien preside la Junta de Gobierno de este organismo operador del agua, porque saben perfectamente que hay un problema de fuga de aguas residuales del registro ubicado en el cruce de las calles Valle de San Luis y Valle de Aosta, que es la parte baja del fraccionamiento Valle Dorado, un problema añejo, que se han resistido a solucionar porque implica una gran inversión, sin embargo, es el OROMAPAS y la Dirección de Obras Públicas, así como la Dirección de Desarrollo Urbano y Ecología, los responsables directos de que la constructora Dynámica, haya dejado estas fallas, al no haber sido supervisado por el gobierno municipal.
Y luego, sale la cantaleta del alcalde, José Gómez, para justificarse “eso fue de otras administraciones” y así lleva poco más dos años de su administración. El hecho es que los vecinos de estas calles, de manera intermitente sufren el malestar que les genera las aguas malolientes que brotan de este registro donde ahora, en esta ocasión, lo único que hicieron trabajadores del OROMAPAS, fue levantar la tapa del registro, colocar un palo para que no se cierre y con ello lograr que en vez de salgan borbollones, el agua corra libremente por la calle y desemboca en el canalón, como lo llaman los vecinos, el cual se ubica atrás de la tienda Chedraui y llega a la carretera 200 hasta atravesarla y finalmente desembocar al predio aledaño a la empresa TRACSA.
Los vecinos también han solicitado a Servicios Públicos Municipales, que dicho canalón, que se encuentra frente a sus casas, se desazolve y se limpie de basura, pero la respuesta de un funcionario, Juan Toscano, es que los vecinos se organicen y hagan ellos el trabajo. Así es como trabajan los funcionarios contratados por José Gómez, según el reporte de vecinos quienes señalan que ya están hartos de la apatía del Oromapas y del gobierno municipal de Bahía de Banderas.
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