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Boston.
Científicos de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio de Estados Unidos (Nasa) descubrieron vivos en los cristales de las cuevas de Naica, en Chihuahua, México, microorganismos con 60 mil años. El hallazgo preocupa a los expertos que preparan viajes para recoger muestras en otros planetas.
Aparentemente, estos extraños microorganismos sobrevivieron tantos años alimentándose de sulfito, manganeso u óxido de cobre, explicó Penelope Boston, directora del Instituto de Astrobiología de la Nasa, en una conferencia en la Asociación Estadunidense para el Avance de la Ciencia, este fin de semana en Boston.
El descubrimiento tiene consecuencias importantes en el intento por comprender la evolución de la vida microbiana en nuestro planeta, precisó Boston.
El descubrimiento aún no ha sido publicado en una revista científica, pero da esperanzas de que se puedan hallar organismos capaces de sobrevivir en ambientes extremos en otros planetas y satélites naturales de nuestro sistema solar, según científicos.
Boston señaló que un centenar de microorganismos diferentes –en su mayoría bacterias– quedaron atrapados en esos cristales durante periodos que van de 10 mil a 60 mil años. De esas especies, 90 por ciento jamás había sido observadas. El descubrimiento de que sobrevivieron decenas de miles de años en condiciones extremas preocupa a los astrobiólogos, pues la resistencia hace pensar que las naves espaciales de exploración podrían traer accidentalmente organismos extraterrestres peligrosos.
Los astrobiólogos hacen hincapié en el riesgo de contaminación si se regresa con organismos de las misiones de exploración, como las de Marte, por ejemplo, donde ya existen varios robots estadunidenses.
Precauciones
En general, la Nasa toma precauciones importantes. Antes de los viajes se esterilizan las naves espaciales y los equipamientos de exploración, pero siempre existe el riesgo de que microorganismos terrestres ultraresistentes hayan sobrevivido.
La preocupación por ese riesgo no es nueva. Ya en la época de las misiones de Apolo, entre 1960 y 1970, se ponía en cuarentena a los astronautas que regresaban del espacio.
Los microorganismos hallados en Naica no son los más antiguos descubiertos hasta ahora. Hace unos años, científicos hallaron microbios vivos con unos 500 mil años. Estaban atrapados en hielo y sal, dos ambientes considerados más propicios para mantener vida que los cristales de las cuevas de Chihuahua.
Estos organismos son extraordinarios, pues no están muy relacionados con nada en las bases de datos genéticos conocidos, señaló Boston.
Descubiertas por los mineros que buscaban plata y otros metales hace 100 años, las cuevas de Naica profundamente enterradas son claves para los científicos fascinados por los extremófilos: microbios que pueden prosperar en condiciones aparentemente imposibles.
Ambiente caliente y húmedo
El ambiente es caliente (40-60 grados centígrados), húmedo y ácido; sin luz en la profundidad, cualquier forma de vida debe hacer quimiosíntesis para sobrevivir, es decir, derivar la energía necesaria para sostenerse por el procesamiento de minerales de roca.
Los investigadores habían identificado los microbios que vivían en las paredes de las cuevas, pero aislarlas desde el interior de los cristales de metros de largo es una sorpresa.
Esas grandes agujas de yeso de millones de años tienen en algunas partes de su estructura defectos, pequeños huecos donde los fluidos se recogen y acumulan.