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WASHINGTON.
Miles de personas en más de 50 países alzaron la voz para no sólo conmemorar el Día Internacional de la Mujer, sino para exigir igualdad real y alertar sobre los abusos que aún sufren las mujeres.
En Estados Unidos, la iniciativa del “Día sin Mujeres”, lanzada en enero por la Marcha de las Mujeres, que protestaron contra las decisiones del presidente Donald Trump, propuso a las mujeres hacer huelga en el trabajo y en la casa el 8 de marzo, lo que provocó ayer el cierre de todas las escuelas de la ciudad de Alejandría, Virginia, debido a la falta de personal femenino.
Las protestas se extendieron a Nueva York, Chicago, Boston, California y Washington, entre otras.
Por su parte, Trump expresó su “inmenso respeto” por las mujeres y saludó su “papel crucial (…) en Estados Unidos y en el mundo entero”.
Pero esos mensajes vía Twitter provocaron que los usuarios le recordaran sus comentarios misóginos, las acusaciones de agresiones sexuales y su controvertida posición sobre el aborto.
En Argentina, Brasil, Perú, Colombia, Costa Rica, Guatemala, El Salvador, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela cientos de organizaciones bajo el lema #8M se organizaron marchas.
Lejos del continente americano, feministas fueron detenidas tras protestar frente al Kremlin en Moscú para reclamar más respeto por los derechos de las mujeres en Rusia, mientras que el presidente Vladimir Putin felicitaba a las mujeres en su día.
En Francia, tres activistas del movimiento feminista Femen llamaron a las mujeres a utilizar su cuerpo como un “estandarte político” para romper el silencio.
En Madrid, España, unas 40 mil personas protestaron con pancartas bajo el lema “Calladita NO estás más guapa”. Mientras que en Italia se manifestaron con flores.
En lugares como Ucrania, Islandia, Polonia, Croacia y Turquía, entre otros, el llamado sexo débil exigió igualdad.
Unas 200 mujeres participaron en una manifestación en Tokio, en protesta por los bajos salarios y las largas jornadas laborales.
En Manila, Filipinas, activistas protestaron ante la embajada de EU, donde quemaron una efigie de Trump, antes de manifestarse en el palacio presidencial.
En Dacca, capital de Bangladesh, unas 15 sobrevivientes de ataques con ácido, perpetrados por lo general contra mujeres en zonas rurales del país, cruzaron el podio de un desfile de moda.
Otras de las naciones que se unieron fueron Chipre, Líbano, Pakistán e India.
ARGENTINAS ALZAN LA VOZ CONTRA FEMINICIDIOS
El planeta dejó de girar por unas horas porque un grupo de mujeres generó un paro internacional en el que intentan poner en la práctica los derechos que tienen por escrito.
En la ciudad de Buenos Aires se escuchó el grito: “No estamos todas”, haciendo hincapié en la cantidad de feminicidios que se cometen en el país.
Pero ésta no es la primera vez que las gargantas argentinas piden igualdad. El 7 de febrero pasado se llevó a cabo el “Tetazo”, en el que pidieron la equidad de género a raíz de la exposición pública de los senos femeninos en la playa, y el pasado 7 de octubre se convocó al “Miércoles Negro”, que expuso la realidad del país: una mujer muere cada 30 horas.
Siguiendo con el reclamo, ayer el suelo del Congreso de la ciudad vibró a las 17 (hora local), en el que mujeres, hombres, niños y familias se juntaron, uniéndose a las protestas en otros países. De allí marcharon hasta la histórica Plaza de Mayo.
Con la Plaza como escenario, miles agitaron sus banderas y utilizaron sus gargantas para exponer la problemática política del país.
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