VERACRUZ, Ver. (proceso.com.mx).- Luego de tres días de realizar inhumaciones y excavaciones en un predio particular de la congregación de Arbolillo en el municipio costero de Alvarado, la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) y policías ministeriales y de Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado han realizado la exhumación de 46 cráneos y cientos de restos humanos.
Tan solo el viernes, reporteros locales dieron cuenta de la exhumación de 12 bolsas negras con restos humanos y 12 cráneos.
“Se trabajaron ocho fosas, las cuales se encuentran ubicadas aproximadamente a 10 kilómetros al centro de Alvarado, ello en un perímetro de 120 metros cuadrados, que es colindante a la laguna de Alvarado; de dichas exhumaciones hasta el momento se han extraído 46 cráneos más múltiples partes corporales”, detalló el fiscal general del estado, Jorge Winckler Ortiz.
Varios de estos cuerpos fueron metidos en bolsas negras, otros bañados con cal y otros más sólo enterrados, con fuertes olores de putrefacción y un análisis preliminar de que cuando menos llevaban 2 ó 3 años sepultados.
Las labores fueron encabezadas por personal de la Marina-Armada de México, quienes desde el primero de febrero buscan a tres de sus colegas del área de Inteligencia, “levantados” por un comando en el Infonavit Buenavista, al norte del Puerto de Veracruz y cuyo paradero hoy se desconoce.
La fosa de Alvarado está ubicada en un rancho aledaño a la carretera federal costera 180, en colindancia con la Laguna de Camarones.
El terreno está muy cerca del poblado de Arbolillo, municipio de Alvarado, en la misma zona donde encontraron ocho cuerpos en mayo de 2015, que habían sido abandonados en un islote.
De esta fosa, la Fiscalía del gobierno de Duarte trató de esquivar a los reporteros asegurando que se habían hecho diligencias en aquel entonces, ironizando que en las inspecciones oculares sólo habrían encontrado “caca de caballo”.
En el semanario Proceso en circulación a partir de hoy domingo, en entrevista el fiscal Jorge Winckler detalló que en Veracruz hay fosas en 44 municipios de 212, casi en uno de cada cinco municipios, “por todos lados hay fosas”, expresa en conversación en su despacho.
Winckler acota que todas ellas “provienen” de la administración pasada (la de Duarte) y en varias habrá que volver a “peinar el terreno” para cerrar la teoría de que podría haber “más cuerpos”.
Enumera el puerto de Veracruz como el “epicentro” de las narcofosas, con el cementerio clandestino de Santa Fe, pero de ahí le siguen Alvarado, Minatitlán, Sayula de Alemán, Coatzacoalcos, Tres Valles, Cosamaloapan, Ixtaczoquitlan, “el norte de la entidad y en muchos otros lados”, señala.
El viernes 17, la ebullición de la violencia llegó a su tope: cinco personas -tres de ellos taxistas- fueron acribilladas en la colonia López Mateos en Coatzacoalcos, al sur de Veracruz.
La madrugada de este domingo, ocho personas -cinco de ellas policías- perdieron la vida en el municipio de Coxquihui.
Hoy por la mañana en el municipio montañoso de Yanga, el reportero Ricardo Monlui Cabrera fue asesinado a balazos por sujetos que se desplazaban en una motocicleta.