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Familiares de las víctimas del ataque terrorista ocurrido en San Bernardino demandaron a Facebook, Google y Twitter, empresas a las que acusaron de proporcionar plataformas para ayudar al grupo Estado Islámico a extender su propaganda, reclutar seguidores y recaudar dinero.
La demanda presentada el miércoles en la corte federal de Los Ángeles argumenta que las compañías ayudaron y fueron cómplices de terrorismo, proporcionaron material de apoyo a grupos terroristas, además de ser responsables de la muerte culposa de tres de las 14 víctimas asesinadas en el ataque del 2 de diciembre de 2015 durante un evento de capacitación y fiesta del departamento de salud.
Syed Rizwan Farook y Tashfeen Malik, la pareja casada que realizó el ataque con fusiles de alto poder, fueron inspirados por el grupo Estado Islámico, señalaron las autoridades. Malik había prometido lealtad al grupo a través de su cuenta de Facebook alrededor del tiempo de la masacre, en la que además resultaron heridas 22 personas.
La demanda es similar a otras contra proveedores de medios sociales que han sido presentadas en tribunales del país por muertes en ataques en la nación y en el extranjero. Los mismos abogados demandaron a las mismas empresas por la masacre ocurrida en 2016 en el club nocturno Pulse en Orlando, Florida.
Algunas de esas querellas han sido desechadas porque la ley federal protege de responsabilidad a los proveedores de servicios de internet por contendido presentado por usuarios.
Facebook dijo que se compadece por las víctimas y sus familias y que retira rápidamente contenido de grupos terroristas cuando es reportado.
«No existe lugar en Facebook para grupos que se involucran en actividad terrorista o para contenido que exprese apoyo a tal actividad», señaló la compañía a través de un comunicado.
Google y Twitter no respondieron de inmediato una solicitud de comentario de The Associated Press.
La demanda dice que las compañías no hacen lo suficiente para bloquear o retirar cuentas del grupo Estado Islámico y que se benefician económicamente de anuncios colocados junto a mensajes del grupo extremista islámico.
«Sin los acusados Twitter, Facebook y Google (YouTube), el explosivo crecimiento de ISIS en los últimos años para convertirse en el grupo terrorista más temido del mundo no hubiera sido posible», agrega la demanda refiriéndose al grupo Estado Islámico por sus siglas en inglés.