Exfiscal de Duarte acusa que la actual FGE le sembró “testigos fantasma”; juez de Veracruz le desecha pruebas

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PACHO VIEJO, Ver. (apro).- Luis Ángel Bravo Contreras, exfiscal general en el sexenio del priista Javier Duarte de Ochoa, acusó en la continuación de la audiencia donde se le acusa de su participación en desaparición forzada, que la actual administración de la Fiscalía General del Estado (FGE) creó “testigos inexistentes” para crear la carpeta de investigación en su contra y girar una orden de aprehensión.

En su turno de defensa, en una audiencia que cayó en receso y se reanudará el próximo sábado, Luis Ángel Bravo pidió la comparecencia de un testigo de identidad resguardada por la propia FGE, pues fustigó que existen “elementos suficientes” que hacen dudar la existencia de ese testigo.

Luis Eduardo Coronel Gamboa, fiscal Especializado en la Búsqueda de Personas No Localizadas -exfuncionario en el gobierno de Duarte- aseguró que ya se buscó a policía ministerial que en enero pasado rindió su declaración.

“Se le buscó en su domicilio en la colonia Obrero Campesina, nos abrió una señora que nos refirió que se mudó a trabajar a otra entidad, paradero que desconoce, y que pidió su baja en el trabajo que tenía porque teme por su integridad física”, excusó Coronel.

El fiscal adjunto, Julio Rodríguez, prometió que en el momento procesal oportuno se aportará el testimonio íntegro del “testigo de identidad resguardada” que señala a Bravo Contreras de haber participado en la alteración de una escena del crimen, correspondiente a la desaparición forzada del expolicía David Lara Cruz, cuyo cuerpo, según tesis de la FGE, fue arrojado en la barranca de “La Aurora”, pero removido -por instrucciones de Luis Bravo, Javier Duarte y su jefe policiaco, Arturo Bermúdez- a la congregación de “Tinajitas” en el municipio de Alto Lucero.

En esa misma carpeta de investigación (439/2018), se señala que fue en enero de 2016, cuando se hallaron 16 cuerpos, sin embargo el gobierno de Duarte solo admitió el hallazgo de seis.

En aquel entonces medios de comunicación que publicaron el dato real de la masacre -entre ellos Apro- recibieron telefonemas pidiendo que se bajara la información, advirtiendo que la vocería de Duarte podría enviar cartas aclaratorias.

En la anterior audiencia de imputación del exfiscal, Luis Ángel Bravo, Coronel -quien fue funcionario en el gobierno de Duarte, de la Comisión Estatal de Atención y Protección de Periodistas y de Derechos Humanos- relató que luego del hallazgo de 19 restos en este área, se reunieron en Casa Veracruz, de manera urgente el exgobernador, el exfiscal y el exsecretario de SSP para determinar “cómo evitar la filtración de más fotografías a la prensa”, pues hasta el momento se había dado a conocer una en la que aparecía seis cuerpos.

“No nos podemos dar el lujo de admitir una masacre porque nos van a partir la madre”, habría dicho Duarte a sus colaboradores para instruir que se escondieran diversos cuerpos. Aunque hoy, no se pudo presentar el “testigo de identidad resguardada”, pese a que se le había solicitado su presencia previa notificación.

En la audiencia de esta tarde-noche, la juez de control, Alma Aleida Sosa Jiménez desechó, por “impertinentes” y “no procedentes”, once de trece pruebas documentales que presentó la defensa legal del exfiscal veracruzano, aprehendido el pasado domingo en la colonia Verónica Anzures, al salir de un centro comercial.

Una de las pruebas que presentó la defensa, llama la atención, pues alegan la “obtención de testimonios mediante coacción”, a raíz de la detención, tortura y privación de la libertad por espacio de doce horas del Analista Administrativo de la Fiscalía, con clave de identidad resguardada F.Z.A. y quien habría sido detenido sin motivo aparente por una cuadrilla comandada por el Fiscal Especializado en la Búsqueda de Personas No Localizadas, Luis Coronel en la ciudad de Córdoba y luego traído a Xalapa, donde fue liberado cerca de la media noche.

“Quiero dejar en evidencia el modus operandi de la Fiscalía, están utilizando conductas ilícitas para obtener pruebas”, fustigó Bravo.

En dicha audiencia vespertina, la defensa solicitó la presencia de tres peritos de la FGE como testigos, los cuales nunca llegaron, razón por la que la continuación de dicha audiencia tendrá dos eventos el sábado.

Por la mañana, la presentación de los testigos y por la tarde, la audiencia de vinculación a proceso, en donde se decidirá si habrá prisión preventiva oficiosa por uno o dos años, en tanto sigue el curso la investigación.

En tanto la defensa, integrada por Luis Eduardo Coronel y Julio Rodríguez rebatieron y desestimaron cada una de las pruebas presentadas por los apoderados legales del exfiscal.
En la larga diligencia, por ratos defensa y ente acusador, cayeron en desorden, en relajamiento en la presentación de documentales y pruebas, por lo que la Juez, Alma Aleyda Sosa pidió a ambas partes que se diligenciaran con seriedad, con ética y profesionalismo.

                                                         
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