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De acuerdo con indicadores del Índice GLAC, Jalisco presenta una mayor incidencia de casos de violencia familiar en contra de mujeres, que se encuentra asociada al incremento en el número de feminicidios.
Entre enero y agosto de 2018, Jalisco registró 0.58 feminicidios por cada 100 mil mujeres, lo que representó un aumento del 56.3 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, cuando se registraron 0.37 casos.
Índice GLAC establece que “el origen del feminicidio es multifactorial y no obedece únicamente a razones de índice delictivo. Un alto porcentaje deriva de la interacción de la víctima con su primer entorno, familiar y social, por lo que la violencia familiar y de género tienen un papel determinante”.
Para determinar el nivel de vinculación entre feminicidio y violencia familiar, se calculó el valor de la correlación entre feminicidio y violencia familiar. Su correlación histórica para los últimos cinco años fue de 0.98 (asociación alta), lo que indica que en Jalisco, una mayor incidencia de casos de violencia familiar en contra de mujeres se encuentra asociada al incremento en el número de feminicidios.
Sin embargo, establece que “para el resto de las entidades del país, en 2017, la correlación entre feminicidio y violencia familiar fue de -0.37 (asociación media) con 0.59 feminicidios y 72.8 casos de violencia familiar por cada 100 mil mujeres. Lo que indica que en otros estados del país, la comisión de feminicidio obedece a otros factores.
Las entidades con condiciones similares a las que presenta Jalisco, en términos de correlación histórica, fueron Sinaloa, Guerrero, Morelos y Zacatecas.
El análisis de GLAC concluye que en México, la violencia en contra de mujeres representa una problemática latente: 13 entidades del país mantienen activa la alerta de género, mientras que otras siete, entre ellas Jalisco, ya realizaron la solicitud para realizar la implementación.
Los comités especiales para la atención de víctimas de violencia sexual o familiar, que planteaba la ley General de víctimas 2013, desaparecieron a partir de los ajustes presupuestales en 2017, lo que ha derivado en una disminución del personal de la Conavim, y en consecuencia en una menor cantidad de eventos atendidos por estos delitos. Jalisco pasó de atender 204 víctimas, en 2014, a 156, en 2017, una reducción del 23 por ciento.
Por otro lado, destacó la marcha de los alumnos de la Universidad de Guadalajara en contra de la violencia y la inseguridad de las que son víctimas, particularmente las mujeres, por los delitos de robo, acoso y homicidio; de éstos últimos, se contabilizaron dos en los últimos años, a los que se suman dos feminicidios.