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Al refrendar la estrategia contra el robo de combustible, el presidente Andrés Manuel López Obrador ofreció a los gobernadores ser respetuoso de la soberanía y libertad de los estados. No les vamos a imponer absolutamente nada, aseguró.
Durante la tercera sesión extraordinaria del Consejo Nacional de Seguridad Pública (CNSP), agradeció a los mandatarios locales su apoyo para atacar ese delito, el cual, subrayó, era una costumbre añeja e insoportable, con pérdidas por 65 mil millones de pesos, tan sólo en 2018.
En el mejor de los casos, explicó, había omisión (de las autoridades) y debido a su magnitud las pérdidas se tenían que descontar de la cuenta pública. Por eso se tomó la decisión de enfrentar el flagelo.
“Voy a mantener con ustedes –dijo– una comunicación permanente, abierta y franca; cada vez que sea necesario vamos a hablar, a comunicarnos, a intercambiar puntos de vista”, señaló.
Al término de su mensaje, el presidente López Obrador se retiró del encuentro, el primero del CNSP en este sexenio, y dejó a cargo al secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, suplente en la presidencia del consejo, cuya anterior sesión fue en diciembre de 2017.
Les dejo un abrazo afectuoso, respetuoso y mi mano abierta, franca para trabajar juntos por el bien de la República, expresó antes de salir del salón Tesorería de Palacio Nacional, adonde acudieron 28 gobernadores, representantes de los tres poderes de la Unión, integrantes del gabinete de seguridad, así como titulares de organismos autónomos y grupos civiles, entre otros.
A la cita no acudieron los gobernadores de Campeche, Yucatán y Oaxaca, por hallarse en Madrid, en un acto de promoción turística, así como el mandatario de Michoacán, quien enfrenta un conflicto con el magisterio por falta de pago de sueldos y prestaciones.
Durante la sesión estuvo atento el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, quien en días recientes ha manifestado su inconformidad por el desabasto de gasolina en su entidad. Ayer declaró ante la prensa –y también por Tuwitter– que no pudo hablar con el Presidente porque sólo estuvo un momento en la reunión; sin embargo, me informaron que hoy se intensificó el esquema de abasto para estar cerca de los niveles que se habían acordado.
Según fuentes consultadas, antes de la cita en Palacio Nacional, el jalisciense conversó con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien le pidió su comprensión por los problemas persistentes en el ducto Tula-Salamanca, por los constantes pinchazos en el tramo, a manos de delincuentes.
Al inicio de su mensaje, el presidente López Obrador les explicó que se tomó la decisión de enfrentar el flagelo por el contexto de corrupción e impunidad, y enlistó a los partícipes en los operativos, en especial los integrantes del gabinete de seguridad.
Agradeció notoriamente el apoyo de los gobernadores, en especial del mandatario de Hidalgo, Omar Fayad, por su colaboración sin mezquindades para enfrentar la desgracia que enlutó la semana pasada a ese estado y a México.
También reconoció el trabajo del Poder Legislativo, por la aprobación de reformas fundamentales para ajustar el marco legal y poder enfrentar los grandes y graves problemas nacionales, así como al Poder Judicial por mantener una relación de respeto y de colaboración con el Ejecutivo.
Extendió el agradecimiento a los organismos autónomos, a los ciudadanos, a los gobernadores y a los alcaldes por su apoyo para continuar en la lucha contra la corrupción, el principal problema de México, subrayó.
Confió en seguir contando con el respaldo de las autoridades y de los ciudadanos para acabar con la corrupción y la impunidad en el país, causas de la crisis.
Nada ha dañado más al país que la deshonestidad de los gobernantes, esa es la causa principal de la desigualdad social y económica, y también por eso se desató la inseguridad y la violencia, dijo.