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CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Con la presencia de José Antonio Meade, el dirigente del PRI, Enrique Ochoa Reza, anunció, sin dar una explicación, su renuncia y la llegada de René Juárez Cisneros.
Al hacer el anuncio, Meade reconoció que este es un cambio importante a 60 días de la votación y reiteró que se van a enfocar en dar a conocer sus propuestas en todo el país en lo que resta de la campaña.
También dijo que con René Juárez espera que haya una coordinación con el partido para tener éxito el 1 de julio.
“Todos los que estamos en la campaña asumiremos el compromiso de trabajar sin reservas ocupando todo el tiempo, disposición y ánimo para contender y ganar el 1 de julio”, confió.
Y enfatizó: “Vamos a contender los 90 minutos, vamos a contender todo el juego, todo el partido con entusiasmo y con convicción, con la convicción de ser el mejor equipo, el que está mejor plantado en la cancha, el que tiene mejor relación con quien sea que esté hablando, ahorita, en este momento crucial”.
Meade mandó el mensaje a la militancia y simpatizantes de que harán un enorme esfuerzo para ganar, pero con unidad.
“Es una campaña, ésta, a la que le faltan muchos días, que van a correr, además, con máxima transparencia. El país entero va a conocer de propuestas y de perfiles. Se vivirá con intensidad esta elección”, ofreció al subrayar una vez más que ganará.
Al despedirse, Ochoa Reza aseguró que el PRI ganará el 1 de julio porque es la mejor alternativa y Meade un hombre “fuerte y honesto”.
Hizo un reconocimiento al presidente Enrique Peña Nieto, a quien agradeció su apoyo y aseguró que seguirá apoyando la campaña de Meade.
Por su parte, René Juárez agradeció la confianza que le ofrece Meade. “Vengo de la entraña propia del PRI”, dijo el político de Guerrero, quien llamó a que nadie se equivoque porque Meade tendrá todo el respaldo del PRI “sin simulaciones”.
Juárez Cisneros asume de manera interina la dirigencia del PRI en lo que resta de la campaña presidencial y, ante el candidato Meade, se comprometió a lograr la unidad del partido para alcanzar el triunfo el 1 de julio.
“Una unidad real sin simulaciones, sin falsas poses”, prometió el nuevo dirigente del PRI haciendo un llamado a la unidad a militantes y simpatizantes”.
