Por Lorena Moguel
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Ya no habrá más vehículos oficiales los fines de semana, es decir los funcionarios administrativos que tienen una unidad automotor propiedad del Ayuntamiento no podrán disfrutar de ellas, esto como una medida de austeridad ante el eminente “gasolinazo”, que incrementará en más de 7 millones de pesos el gasto en este rubro, así lo dijo el alcalde, Arturo Dávalos en el marco de la partida de rosca en el patio central de la presidencia.
En su mensaje a los servidores públicos del municipio y como testigo ciudadanos que acudieron a las instalaciones, Dávalos fue contundente: “lo que estamos haciendo son medidas disciplinarias, nos vamos a ajustar el cinturón, a través de medidas austeras”.
“Los vehículos administrativos se tienen qué resguardar para no estar generando gasto de combustible los fines de semana. Si no tienen nada qué hacer sábado y domingo, no tienen qué andar en los vehículos oficiales- administrativos; los operativos son diferentes.
Seguridad, Reglamentos, Servicios Públicos, Aseo… estos tienen qué trabajar y no se puede parar. Estas sí son dependencias que trabajan diario en un beneficio a la comunidad”.
“Estas medidas son, precisamente, para ahorrar, porque nos espera un año complicado”, apuntó. Y añadió que está es una de las varias estrategias internas en la administración.
Otro de los temas que hizo público fue el de la basura, “a partir del 15 de enero , cambiamos el nuevo sistema de recolección, que nos facilitará el trabajo porque se dividió en dos zonas Norte (del río Pitillal hacia arriba) y la zona Sur (del río Pitillal para el centro) esto facilitará a Reglamentos y Ecología a quienes no estén cumpliendo con el nuevo sistema de recolección de basura”. La única excepción de recolección de todos los días será la zona turística.
Informó que ya promueven a través de los medios tradicionales y electrónicos este nuevo esquema, del que también pidió a los servidores públicos difundir en sus redes sociales las rutas y horarios “y lo más importante es que vuelve el campaneo”.
“Vamos a calidad de vida de todos los que viven aquí, y este es compromiso”.
Recordó la negociación llevada a cabo con la empresa ProActiva a la que tendrán qué pagar 123 millones de pesos en lo que resta de su gobierno. “Así que ya no podemos echarle la culpa a nadie. Así que todos tenemos qué participar, incluyendo la sociedad, la iniciativa privada podremos salir adelante”.
Reconoció que muchos empleados “brincan” porque están ordenando este tipo de situación, tan así que buscan los padrinos, “pero vamos a poner orden”, insistió.
