Por Paty Aguilar
En alrededor de 10 bordos que atraviesan el río hasta casi estrangularlo, se monta la maquinaria pesada para extraer el material pétreo del cauce del Río Ameca, Bahía de Banderas, Nayarit, por parte del Grupo VIDANTA que construye un megaproyecto turístico en la inmediaciones de este río que desemboca al mar del pacifico en colindancia con Puerto Vallarta y que divide a los estados de Nayarit y Jalisco, México, lo que ha generado el estancamiento del agua de por sí ya contaminada por aguas negras vertidas por poblados de ambos municipios, pero principalmente, de las comunidades de Bahía de Banderas.
Este estancamiento de agua, a la altura del puente del Río Ameca que conecta ambos destinos turísticos, despide ya aroma maloliente, es decir, esa zona apesta debido a que esa agua contaminada de aguas negras no fluye al mar donde de manera natural, hace el trabajo de saneamiento.
El motivo de estos diques de arena sobre el cauce del río es para extraer material pétreo con el cual se construye el magno desarrollo turístico del Grupo VIDANTA y al mismo tiempo genera una especie de represa que estanca el agua del río que ya se mira de color verde y negra, con la cual se alimenta el lago artificial que se construye al lado del cauce del rio como parte de este megaproyecto, que por supuesto, genera empleo, pero a costa de los estragos que se le está generando al Río Ameca, y a la flora y fauna del lugar, según señalamientos de ciudadanos que ven con asombro y preocupación la extracción indiscriminada de material pétreo, aunque por otra parte, hay quienes opinan que no se está haciendo daño y que lo que importa es la generación de cientos de empleos que genera el Grupo Vidanta.
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