Por Adrián De los Santos
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La tarde de este jueves, luego de algunas horas de trabajo cuidadoso, elementos del área de Ecología en coordinación con elementos del cuerpo de Bomberos y de la Unidad Municipal de Protección Civil, lograron capturar uno de tres cocodrilos que fueron vistos en la playa, a la altura del hotel Grand Fiesta Americana.
Los tres cocodrilos fueron vistos por empleados del hotel, quienes de inmediato aplicaron sus protocolos de seguridad, alertando a las autoridades municipales, mismas que al llegar al lugar solo tuvieron a la vista a uno de ellos, de una medida considerable, por lo que fue necesario llamar al personal del área de Ecología para que realizaran las maniobras de rescate.
Fue a eso de las 10:30 horas de este jueves cuando fueron alertados los agentes de la Policía Turística en torno a los tres cocodrilos que andaban en la playa del hotel Gran Fiesta.
Al lugar acudieron los agentes, mismos que confirmaron que solo andaba uno en la playa, que había salido a un costado del hotel Grand Fiesta Americana, pero que para esos momentos el personal de seguridad del hotel, sacó a las personas que andaban en el mar para evitar algún ataque.
No tardaron en llegar elementos del cuerpo de Bomberos al mando del oficial Pedro Vázquez, llegando atrás de ellos personal de Ecología, quienes al ver que se trataba de un cocodrilo de algunos 30 años de edad aproximadamente, de dos metros y medio, así como de un peso considerable, procedieron a llamar a sus demás compañeros para que llegaran con el equipo necesario, para su captura.
Para esos momentos ya había sido alertado el personal del área de Guardavidas, los cuales llegaron por mar y tierra, a bordo de una unidad terrestre y una embarcación.
Al llegar el equipo necesario, procedieron a realizar las maniobras correspondientes, las cuales, siendo necesario la paciencia y destreza para poder capturar al cocodrilo, el cual se metía al mar y trataba de salir, lo que indicaba que ya andaba cansado.
Lo anterior ayudó mucho a que el cocodrilo quisiera salir a la playa, siendo necesario que con una moto acuática comenzarán a llevarlo a una pequeña bahía, en donde aprovecharon de la oportunidad para ser atrapado sin lastimarlo.
De los datos ofrecidos por los expertos que se dieron cita en el lugar, confirmaron que el ejemplar midió dos metros 90 centímetros, de los cuales 40 centímetros conformaban la cabeza, detectando además que presentaba tres marcas, lo que indicaba que con ésta ya era la cuarta vez que era atrapado y llevado al estero de Boca de Tomates.
Se informó que el cocodrilo sería llevado al área de Ecología para los estudios correspondientes, entre ellos revisar el estado de salud del mismo, para finalmente llevarlo al estero, donde sería liberado.
