Por José Luis Preciado Trujillo
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un aparatoso accidente ocurrió sobre la avenida principal de San Juan de Abajo, donde una despistada mujer que conducía su camioneta de modelo reciente dañó la puerta del otro vehículo que estaba estacionado, afortunadamente no hubo víctimas que lamentar, solo daños materiales.
Los hechos ocurrieron aproximadamente a las 13:10 horas de este miércoles 26 de diciembre, sobre la avenida Lázaro Cárdenas, en el cruce de 2 de Octubre y 18 de Marzo, en el poblado de San Juan de Abajo, en donde reportaban a la cabina de radio de Tránsito Municipal, sobre un choque entre dos vehículos, indicándoles que los mismos estaban atravesados en plena avenida tapando la circulación de los carros, por lo que solicitaban la presencia de los agentes viales.
Al lugar acudieron para atender el reporte los elementos de la Policía Vial, a bordo de una moto patrulla y de otras unidades, quienes al arribar se percatan del accidente y luego informan a su base operativa que se trata de dos vehículos involucrados, una camioneta de la marca Nissan, tipo Frontier, modelo reciente, de color blanco, con las placas de circulación JU-42-758, del estado de Jalisco, que conducía una persona del sexo femenino de nombre Nancy Gabriela, de 29 años de edad, vecina de San José del Valle y una camioneta Explorer, de color tinta, con las metálicas RGD-63-64, del estado de Nayarit, que era conducida por un masculino de nombre José Alonso González, vecino de el Coatante, Nayarit, con domicilio conocido.
Según comentan testigos que la fémina de la camioneta Frontier, al ir circulando sobre la avenida Lázaro Cárdenas, de repente se impacta contra la puerta de la Explorer, que fue abierta por su conductor, causándole serios daño materiales, al igual que resultó con daños el vehículo Pick UP, que ella conducía.
Los agentes de Tránsito tomaron nota y luego de verificar que no hubiera personas lesionadas, les dieron las indicaciones a los involucrados en el accidente para que dialogaran y trataran de llegar a un común acuerdo o de lo contrario los vehículos se irían al corralón en donde serían resguardados, mismos que quedaron a disposición de la autoridad competente para que deslindaran responsabilidades, haciéndose cargo de los trámites el ajustador de seguros.
