El pasado martes 19 de junio se impartió la conferencia “Las claves de la pregunta por el habitar”, por la reconocida investigadora, promotora del Pensamiento Ambiental Latinoamericano, Dra. Ana Patricia Noguera de Echeverri, quien también es Profesora Titular y Emérita de la Universidad Nacional de Colombia Sede Manizales; todo esto como complemento a los ejercicios reflexivos y de debate que se están llevando a cabo en las instalaciones del Instituto Vallartense de Cultura.
La conferencia tuvo como objetivo analizar el progreso urbanístico del puerto, centrándose en el entorno donde, en un principio, los seres humanos deben convivir en sinergia con la naturaleza.
Expuso que desde el siglo XIX muchos pensadores mostraron gran preocupación por el crecimiento y la industrialización desmedidas, pues el desarrollo tecnológico no vino acompañado del entendimiento a conceptos humanistas como el ser, el actuar y la conservación del entorno ambiental, detonando una crisis ambiental que ahora se ve reflejada en la crisis civilizatoria en el mundo entero.
Agregó que la forma de conocimiento racional-centrista sigue presente en las ciencias y en las humanidades, dándole la espalda a la naturaleza que, sin embargo, habita. El proceso siempre ha sido el mismo: el hombre siente la necesidad de poseer un pedazo de tierra, para después venderlo, explotarlo y transformarlo en un paisaje artificial.
“Hemos olvidado que estamos completamente ligados a la tierra. Nuestro hábitat-habitar no podría sostenerse sin ella y a la cual su existencia se debe”, señaló.
Noguera de Echeverri indicó que en la cultura todas las áreas de conocimiento conforman el entramado que mantienen los ecosistemas: desde el lenguaje, el arte, la ciencia y la tecnología, hasta la comercialización y explotación de las áreas. Si bien ésta es diversa y no se agota, sus leyes difieren a los sistemas socioculturales de hombre moderno.
En el punto álgido de la ponencia, la doctora remarcó que abandonar el confort tecnológico podría ser la clave para volver a replantear cómo habitamos la tierra. Dentro del pensamiento ambiental sur, la tierra no es un recurso para extraer de él cuanto se desee, sino para convivir en armonía y equilibradamente.
Agregó que las transformaciones ambientales no se generan de manera lineal, ni en consecuencia una de la otra, sino al tiempo y usando la educación como instrumento. Es por ello que se necesita del poeta y no necesariamente de aquel que produce poesía, sino de aquel que es capaz de pasar del consumo al cuidado, a la transformación profunda de la conciencia colectiva.
Con una asistencia récord, la conferencia cerró con muy buenos comentarios y los asistentes señalaron que es imperativo continuar acercando estos temas a la población, para promover no sólo la conservación de nuestros recursos, sino para hacer frente a las acciones que día a día se emprenden en su contra.
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