Por José Luis Preciado Trujillo
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Conocido vecino de San Juan de Abajo, fue arrollado por un camión de transporte de personal cuando circulaba a bordo de una motocicleta, mismo que fue impactado, según testigos, en un descuido del chofer, de quien dicen que iba platicando y no se fijó cuando la moto cruzaba la calle.
Los hechos ocurrieron en el cruce de las calles Constitución y Miguel Hidalgo, en el poblado de San Juan de Abajo, en donde alertaban a los agentes de Tránsito, en la cabina de radio sobre un accidente entre dos vehículos y en donde además reportaban que había una persona lesionada.
Al lugar se dirigieron los agentes viales Víctor Manuel García y Marcos Iván Peña, a bordo de una unidad radio patrulla, la PV-136, quienes al arribar informan a su base operativa que se tata efectivamente de un choque entre dos vehículos, siendo como presunto responsable un camión de transporte de personal, marca Mercedes Benz, tipo autobús, de color blanco, con las placas de circulación 1NCH57, del estado de Puebla, que momentos antes era conducido por una persona del sexo masculino que dijo llamarse Carlos Alberto Bautista Colmenares,con domicilio conocido en el fraccionamiento Jardines de San José.
Se supo de parte de testigos, que el conductor del autobús al parecer iba platicando con los empleados del hotel Gran Velas, a los que traía a bordo, y en un momento dado se descuidó y no se percató de que en ese momento cruzaba en su camino una motocicleta de la marca Italika, de color negro, modelo 2016, sin placas de circulación, a la que arrolló, resultando con lesiones el conductor de nombre Santos Antonio García, con domicilio en San Juan de Abajo, el cual fue auxiliado por los paramédicos municipales, de Protección Civil que llegaron a bordo de la ambulancia PC-04, al mando de Adriana Trejo, quien le brindó los primeros auxilios al motociclista, percatándose de que no ameritaba traslado, por lo que se quedó en el lugar en espera a que arribaran los ajustadores de seguros para tratar de conveniar y luego realizar los trámites correspondientes ante la autoridad competente, firmando ambos conductores un acta convenio y constancia de no formulación de querella.
Con lo anterior, deslindaron de toda responsabilidad a los agentes viales de Tránsito Municipal.
