Quiénes son los narcos que podrían haber fingido su muerte para colaborar con las autoridades de EEUU en el combate al crimen organizado
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En la historia del narcotráfico hay al menos tres mitos que se formaron en torno a la muerte de criminales como Juan José Esparragoza Moreno (”El Azul), Amado Carrillo Fuentes (”El Señor de los Cielos”) y Nazario Moreno González (”EL Chayo”); los tres desaparecieron del mapa criminal cuando sus carreras como líderes del Cártel de Sinaloa, Cártel de Juárez y La Familia Michoacana, respectivamente, se encontraban en sus puntos más altos, una condición que podría ocurrir -según el periodista Jesús Lemus- con personajes del hampa como Ismael El Mayo Zambada y Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho.
En entrevista para Infobae México, el autor de libros como “El Licenciado”, “El Fiscal Imperial” y “El Cártel Judicial” comentó que tanto El Mayo Zambada como El Mencho -quizá los dos narcotraficantes más poderosos del país a sus 76 y 57 años, respectivamente- podrían ser los siguientes en la lista para “desaparecer” del radar de las autoridades y en circunstancias “sospechosas” anunciar sus muertes.
“Tenemos a varios en este campo que en su momento pudieron haber utilizado esta figura y acogerse a ella, que no nada más se las da la DEA (Administración para el Control de Drogas); en un momento determinado El Mencho le vendió su muerte a Genaro García Luna”: Jesús Lemus.
La “figura” a la que hace mención el periodista tiene que ver con los rumores respecto a que “El Azul”, “El Señor de los Cielos” y el propio Mayo Zambada, estarían actuando como testigos protegidos y cooperando con la DEA: “Y que por eso no lo tocan y que por eso lo mantienen tranquilo y que por eso ha mantenido el control”.
La presunta “cooperación” de El Mayo Zambada con la DEA permitiría a su facción del Cártel de Sinaloa resistir las embestidas de Los Chapitos y del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG); aunque, advierte Jesús Lemus, “podríamos estar viendo que ya va hacia abajo, en plena decadencia, porque ya no mueve las toneladas de cocaína que decían que movía a Estados Unidas”.
¿Quién nos garantiza que están muertos?
El 9 de junio de 2014, la entonces Procuraduría General de la República (FGR) reconoció que no tenían indicios para confirmar la muerte de “El Azul”, esto tan sólo dos días después de que el semanario Río Doce publicara la muerte y misa que la familia de Esparragoza Morena realizó para despedir al capo que apenas un año antes fue incluido en la lista de los más buscados por la DEA.
La historia de Amado Carrillo es harto conocida. Habían pasado apenas cuatro años desde la muerte -se presume que él lo mandó a matar- de Rafael Aguilar Guajardo, su exjefe y maestro en el Cártel de Juárez. Al igual que “El Azul”, la DEA le puso precio a “El Señor de los Cielos”, ofrecían hasta 30 millones de pesos y lo responsabilizaron de mover el 60 por ciento de toda la cocaína que entraba a Estados Unidos.
A Nazario Moreno le dicen el “narco que murió dos veces”: la primera de ellas cuando la administración de Felipe Calderón anunció que había sido abatido durante un enfrentamiento con las fuerzas armadas en Apatzingán; sin embargo, el 9 de marzo de 2014 el gobierno de Enrique Peña Nieto afirmó que “ahora sí” ya estaba muerto. Pese a ello hay rumores que afirman sigue al frente del crimen organizado en Michoacán.
En la plática con Infobae, Jesús Lemus trae a la memoria a Héctor Beltrán Leyva, muerto al interior del penal de El Altiplano, aunque la versión oficial dice que falleció de un infarto en el Hospital Adolfo López Mateos. “Aunque quién nos asegura que murió, quién vio el cuerpo”.