Maquinaria ajena a SEAPAL Vallarta fue sorprendida en el área protegida de la fuente de abastecimiento.
SEAPAL Vallarta continúa sin quitar el dedo del renglón en la protección de su principal fuente de abastecimiento, el Pozo Radial, la cual abastece por sí sola a más de 100 mil habitantes de esta ciudad portuaria.
La tarde de este jueves, una vez más, empresas cribadoras y sus maquinarias fueron sorprendidas dentro de los 3 kilómetros de área protegida de esta instalación, actuando al margen de la ley, para la extracción y explotación de material pétreo.
Personal del organismo, con apoyo de elementos de la Dirección de Seguridad Ciudadana, actuó de manera inmediata para frenar estas acciones que además de modificar el cauce de los ríos Ameca y Mascota, impiden la correcta extracción de agua en este punto y la capacidad de los drenes para filtrarla, lo que a su vez afecta el abasto a la zona norte de Puerto Vallarta, principalmente a colonias de la delegación El Pitillal.
Asimismo, esta actividad ilícita de sobreexplotación de recursos naturales, ocasiona que el cauce baje de nivel y la presión de agua que requieren los subdrenes disminuyan considerablemente.
Cabe recordar que durante el pasado mes de marzo, personal y directivos del organismo con el apoyo de diversas dependencias del Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, realizaron un nuevo operativo de vigilancia y supervisión, en el que tras solicitar permisos a cuatro empresas cribadoras, se procedió a la clausura de sus labores.
La actual administración de SEAPAL Vallarta también ha puesto énfasis en fortalecer al Pozo Radial, con una serie de obras para revertir afectaciones que se han suscitado por este y otros factores en esta área, en menoscabo directo del bienestar y patrimonio de las familias vallartenses.
No obstante, de continuar estas actividades por parte de las cribas, están en riesgo estas mejoras palpables que han logrando elevar la capacidad de producción a 180 litros por segundo en este temporal de estiaje y por consiguiente, la calidad de vida de miles de familias y sus actividades productivas.
Esto sin contar las afectaciones económicas para SEAPAL y todos los vallatrenses, toda vez que disminuye la producción de agua que debería llevarse a las plantas potabilizadoras para su posterior distribución.
Es fundamental conservar el área protegida, para que cualquier acción que se lleve a cabo sea de manera coordinada y bajo supervisión de SEAPAL, en virtud que además está de por medio la conservación del ecosistema existente alrededor del cauce, tanto de flora como de fauna.
