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ROMA (apro).- Los narcos mexicanos tratan de igual a igual a la Ndrangheta calabresa, la mafia nacida en el sur de Italia y considerada una de las mayores multinacionales del crimen internacional, consideró hoy el fiscal antimafia del país europeo, Federico Cafiero De Raho.
“Los cárteles colombianos y mexicanos ven a la Ndrangheta como un protagonista que está en su mismo nivel”, afirmó el fiscal italiano.
Cafiero De Raho declaró lo anterior después de un espectacular operativo antimafia que arrancó en las primeras horas de este miércoles en Italia, Alemania, Países Bajos, Bélgica y Colombia, e implicó a las policías de los países involucrados.
La operación, denominada “Pollino-European Ndrangheta Connection”, que inició en 2014, llevó a la detención de 90 sujetos de distintas nacionalidades, entre ellas de Italia, Australia, Turquía, Alemania, Bélgica, Rumanía, Surinam, Colombia y Guyana, según una nota de la Fiscalía de Reggio Calabria a la que tuvo acceso este medio.
Asimismo, fueron golpeadas algunas de las familias ndranghetistas más poderosas dentro de la organización, entre ellos los Pelle-Vottari, los Ietto-Marando y los Romeo, así como personas de un clan de la mafia siciliana, la Cosa Nostra, vinculadas a la mafia calabresa en sus tráficos ilícitos.
En cuanto al nexo mexicano, Cafiero De Raho no puntualizó si durante la operación fue aclarado el rol de los narcos mexicanos en el traslado de drogas a Europa. Una alianza que en años pasados mantuvieron los mafiosos italianos tanto con el Cártel del Golfo como con los Zetas.
De hecho, pese a que el último operativo de la policía para desmantelar ese nexo tiene más de una década, observadores que conocen de cerca el fenómeno creen que el vínculo se ha mantenido, aunque ahora es más puntual y se decide con base en cada cargamento de droga.
El sujeto colombiano arrestado es César Steven Linares Ramírez, nacido en Cali en 1994, mientras que la persona de la mafia italiana que mantenía una relación con los narcos colombianos es Serafino Rubino, prófugo de la justicia italiana, instalado en el país latinoamericano.
Una empresa internacional
Los detenidos han sido acusados de delitos como tráfico internacional de estupefacientes, asociación mafiosa, lavado de dinero y haber usado prestanombres y bienes de manera fraudulenta para ocultar sus actividades ilícitas.
De acuerdo con la reconstrucción hecha por los fiscales, los mafiosos habían organizado una compleja red de importación de cocaína, proveniente de América Latina, que era almacenada en Holanda, Bélgica y Alemania, para luego ser vendida en las calles de esos países y en Italia.
Además, el grupo, actuando como una verdadera empresa, utilizaba restaurantes y otras actividades comerciales para lavar el dinero obtenido del tráfico de drogas. Algunos de estos comercios eran el restaurante “La Piazza 3” y la heladería contigua “Cafè La Piazza” de Brüggen, en Alemania.
En Alemania, de acuerdo con las investigaciones, la red se apoyaba en criminales de origen turco, desde hace años emigrados a ese país.
El operativo también confirmó que la ruta operada por la red criminal preveía el traslado de sus mercancías de América Latina hasta África, en particular a Guyana y Suriname, para mover luego las drogas a Europa. Algunos puertos europeos de destino de estos tráficos resultaron ser Róterdam y Amberes, además de que en un caso la droga fue localizada en Panamá y en otro en Grecia.
Las investigaciones también llevaron a la detención de una mujer, Maria Rosaria Campagna, vinculada a los clanes sicilianos, y también fueron descubiertos fraudes contra compañías de seguros.
En total fueron confiscados “entre 3 mil y 4 mil kilos de cocaína, dos millones de euros y 140 kilos de pastillas de éxtasis”, puntualizaron las autoridades europeas involucradas.
Para gestionar la magnitud del operativo, las policías y los fiscales de los países involucrados actuaron en el marco del “Joint Investigation Team”, el Equipo Conjunto de Investigación (JIT, en inglés), un grupo de trabajo creado en 2016 en La Haya.
La operación también contó con la colaboración de la Administración para el Control de Drogas (DEA) estadunidense, la Oficina Europea de Policía (Europol) y Eurojust, el departamento que se encarga de coordinar las actividades de los fiscales europeos.
Todo ello supuso un enorme empleo de efectivos. Tan sólo en Alemania, este miércoles participaron 440 agentes, quienes registraron 65 viviendas y comercios, principalmente en los estados de Renania del Norte-Westfalia y Baviera, que condujo a la detención de 14 personas.
La noticia de la masiva redada internacional se produjo un día después de que la policía italiana revelara la detención de los supuestos nuevos líderes de la mafia siciliana, Cosa Nostra.
Esta última intentaba reorganizarse tras la muerte del ‘jefe de los jefes’ Totó Riina, ocurrida en una cárcel de Parma (Italia) en noviembre de 2017. Entre éstos también fue apresado Settiminio Mineo, considerado el sucesor al mando de la organización. No se descarta que en los próximos días se difundan nuevos detalles sobre el caso.