Por el centro de Puerto Vallarta
Ninguna autoridad o reglamento ha podido frenar la contaminación auditiva que provocan turistas principalmente nacionales quienes rentan para pasear por Puerto Vallarta los llamados autos tubulares.
Música que rebasa los decibeles permisibles, según se ha denunciado.
Empresas que se dedican a la renta de este tipo de vehículos, no han hecho tampoco nada para erradicar esta práctica nociva.
No siquiera los agentes de tránsito en los cruceros y esquinas viales.
En Puerto Vallarta, se ha generado una creciente preocupación debido a la problemática relacionada con los turistas que alquilan autos tubulares y circulan por el centro de la ciudad con un volumen de música que supera los límites permitidos de decibeles establecidos por la autoridad.
Esta situación ha generado molestias entre los residentes locales y ha afectado negativamente la experiencia de otros visitantes que buscan disfrutar de la tranquilidad y el ambiente relajado de la ciudad.
A pesar de las quejas recurrentes por parte de la comunidad, parece haber una falta de acción por parte de las autoridades locales para abordar este problema de manera efectiva.
La ausencia de medidas para controlar el exceso de ruido y regular el comportamiento de los turistas que alquilan estos vehículos tubulares ha generado frustración entre los residentes y ha generado un ambiente de tensión en algunas áreas del centro de la ciudad.
La situación plantea interrogantes sobre la capacidad de las autoridades locales para hacer cumplir las regulaciones y proteger el bienestar de la comunidad, así como la experiencia de los turistas.
Se espera que se tomen medidas concretas para abordar esta problemática y promover un equilibrio entre el turismo y la calidad de vida de los residentes locales en Puerto Vallarta.
Los residentes locales y las autoridades competentes deben colaborar en la búsqueda de soluciones viables que permitan mitigar el impacto negativo del ruido excesivo causado por los turistas que alquilan autos tubulares, al mismo tiempo que se garantiza una experiencia positiva para todos los visitantes y residentes de la ciudad.
