La diversidad genética permite al sistema inmunológico detectar las células cancerosas transmisibles.
actualidad.rt.com
El mecanismo de reproducción sexual pudo originarse en respuesta a la exposición de las primeras criaturas pluricelulares al cáncer contagioso, afirma un estudio publicado este jueves por un equipo internacional de investigadores en la revista PLOS Biology.
Los tumores transmisibles, detectados hasta ahora en varias especies tanto vertebradas como invertebradas, ocurren porque el sistema inmunológico puede confundir las células cancerosas de un organismo genéticamente muy similar con las suyas, rechazando eliminarlas y permitiendo el desarrollo del cáncer. Los ejemplos más conocidos son la epidemia de leucemia en los moluscos Mya arenaria y el tumor que diezmo la población de los demonios de Tasmania desde 1996.
Los autores del nuevo estudio, liderados por Frédéric Thomas y Thomas Madsen, opinan que las dichas infecciones serían mucho más comunes si la mayoría de las especies no estuvieran divididas en hembras y machos.
«La reproducción sexual permite el cambio sistemático del genotipo del organismo multicelular y, por lo tanto, una mejor detección de las células cancerosas transmisibles por parte del sistema inmunológico», reza el estudio.
De hecho, la reproducción asegura un alto nivel de diversidad genética, dada la recombinación de los genes realizada cada vez que se genera un nuevo espécimen, por lo que puede ser menos costoso para la especie que la reproducción asexual, sostienen los científicos.
«Dada la ubicuidad de los procesos oncogénicos en el mundo multicelular junto con la diversidad de las rutas potenciales de la transmisión, la reproducción sexual, a pesar de sus costos asociados, puede haber sido favorecida como una opción menos arriesgada y más rentable para producir descendencia viable», sintetizan.