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GUADALAJARA, Jal. (apro).- Una llamada anónima al 911 alertando sobre la supuesta colocación de un artefacto explosivo en el municipio de Juchitlán, donde estuvo este jueves el gobernador Enrique Alfaro, puso en alerta al equipo de seguridad del mandatario que de inmediato activó el protocolo habitual para ese tipo de casos.
En redes sociales circuló un mensaje que mencionaba que un hombre llamó al C5 para denunciar que el gobernador, sería asesinado, puesto que se había colocado una bomba en una unidad deportiva en Juchitlán.
Macedonio Tamez confirmó que sí se recibió una llamada anónima al 911 “denunciando la colocación de un supuesto artefacto explosivo en algún lugar de la gira el señor gobernador ha realizado hoy en la Sierra de Amula”.
Precisó que cuando el mandatario estatal está de gira “se toman todas las precauciones y providencias necesarias. En este caso habiendo una denuncia anónima, se echó a andar el protocolo habitual”.
Indicó que no encontraron ningún artefacto y que durante la gira nunca “hubo un riesgo para el gobernador, o para los asistentes que lo acompañaron (…) entonces, finalmente no se trata más que de una falsa alarma”.
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