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Desorden vial en el paseo del malecón

Por Mauricio Lira Camacho
NOTICIASPV

Automovilistas particulares no respetan el parador especial para unidades de turismo y de personas con discapacidad, sobre el paseo del malecón.

A unos metros de donde se ubica el edificio de la presidencia municipal en el centro de Puerto Vallarta, se localiza un parador especial para camiones de turismo y de personas discapacitadas.
Pero los automovilistas particulares no respetan.

Por lo que hay un desorden vial en el paseo del malecón, cada quien se estaciona como puede, automovilistas sobre todo particulares ocupan el espacio del parador para unidades especiales, sobre el paseo del malecón.

Así lo sustenta un ciudadano quien envió una queja por escrito a este medio de comunicación, haciendo la petición de que sea publicada, lo mismo que hecha viral en redes sociales.

A esta queja, adjuntó imágenes en donde se ilustra la gravedad del problema, en donde añade en su escrito, brilla por su ausencia autoridad en materia de tránsito municipal, quienes no hacen respetar la reflamentación correspondiente.

«Este reporte que les paso, tiene mucho que ver con el ordenamiento vial que debe existir en todo el primer cuadro en el municipio de Puerto Vallarta».

«Paso reporte ya que no hay ningún tipo de orden en el malecon y la unidad de vialidad municipal, brilla por su ausencia».

«Esto debido a que cada quien se estacionan como les da la gana, ignorando en todo momento o valiéndose el reglamento de tránsito de Puerto Vallarta», añade en su denuncia.

Ahora que hay temporada alta de turismo con motivo de las vacaciones del mes de diciembre, aumenta el flujo vehicular en el centro, lo que provoca una saturación de espacios para estacionamiento, habiendo incluso lugares especiales localizados en la plancha de concreto del Hidalgo, lo que fue el parque de la Benito Juárez y en lo que fue el parque Lázaro Cárdenas.

Hoy, a toda hora se observa una larga fila de autos particulares en este parador especial, que debería estar libre de cualquier unidad.

Con esta y otras situaciones, se provoca un cuello de botella con el tránsito sobre todo nocturno, en el paseo del malecón.

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