El profesor Jorge Palafox, del plantel 7 de Puerto Vallarta agradece públicamente a sus alumnos y exalumnos por su apoyo, después de que estos repartieran volantes en su favor, pidiendo su restitución como docente. El profesor denuncia que, en respuesta, los estudiantes fueron objeto de acoso, intimidación y revisiones arbitrarias por parte de una profesora acusada previamente de acoso escolar.
A través de una carta abierta, el profesor Jorge Palafox, agradece a sus alumnos y exalumnos del CECYTEJ #7 su apoyo solidario para buscar su restitución como docente. Sin embargo, en esa carta el profesor también denuncia que sus alumnos y exalumnos que repartieron volantes a las afueras del plantel fueron objeto de acoso e intimidación por parte de la administración escolar.
Además, denunció los actos de revictimización que sufren los estudiantes, señalando irregularidades en los procedimientos de la dirección del plantel y la falta de transparencia en el manejo de las acusaciones de acoso escolar.
Esto dice su carta abierta:
Carta abierta a mis alumnos y exalumnos del CECYTEJ
Agradezco a mis alumnos y exalumnos porque en las últimas dos semanas, afuera del plantel 7 de Puerto Vallarta, repartieron volantes de afecto y solidaridad hacia mi persona, con el propósito de que se me restituya en mi cargo como profesor.
Se los agradezco porque nuevamente fueron objeto de acoso, intimidación y agresiones, e incluso de revisiones arbitrarias de mochilas, con el fin de que ningún alumno se atreva a expresar libremente sus ideas. Lo más preocupante es que quien realizó estos actos fue la misma profesora a quien los alumnos acusaron de acoso escolar ante el órgano interno de control del CECYTEJ. Pero, ¿quién le dio y quién le da esa autoridad a una profesora acusada de acoso? La directora del plantel.
Es decir, los alumnos ahora son objeto de revictimización.
Además, en estos días, la directora del plantel ha mandado llamar a varios alumnos para que se presenten en su oficina. Los estudiantes se presentan solos, sin la compañía de su maestro, jefe de grupo o tutor. Y ya en la oficina, se encuentran con la directora y la profesora acusada de acoso, donde son sometidos a un interrogatorio, lo cual está prohibido por la ley. Buscan saber si tienen contacto conmigo, quién reparte los volantes y les piden que informen cuándo me ven o cuándo se distribuyen los volantes.
Es claro que esto es, ni más ni menos, una revictimización en agravio de los alumnos, quienes son menores de edad.
Me pregunto si los padres de esos estudiantes están enterados de estos interrogatorios. ¿Con qué autoridad la directora del plantel convierte la dirección escolar en un espacio de confabulación? ¿Qué atribuciones cree tener para llamar a los alumnos a un interrogatorio frente a su acosadora? Y lo más importante, ¿la Dirección General de CECYTEJ estará enterada de esta situación ilegal e irracional? ¿Lo sabrá la Secretaría de Educación Jalisco?
La Dirección General debería preocuparse de que un grupo de confabuladores se haya enquistado en la dirección del plantel, causando tropelías en agravio de los estudiantes. Ni los alumnos ni sus padres tienen la obligación jurídica de soportar que se les revictimice, esculque o interrogue, ya que no existe fundamento legal para justificar el daño que se les causa.
La verdad, ¡pobre plantel! La ineptitud de la dirección se ha impuesto como sistema, y ahora pretenden elevar a mérito la impunidad, el acoso y la revictimización.
Por todo esto, agradezco a mis alumnos y exalumnos por manifestar su solidaridad con mi causa, porque lo hacen a pesar de todo. ¡Qué valientes! #Palafox