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CHILPANCINGO. Gro. (apro).- Un grupo armado ejecutó al dirigente del partido Movimiento Ciudadano (MC), Armando Arturo López Solano, en el municipio de Quechultenango, ubicado en la región Centro de la entidad.
El crimen del líder partidista y aspirante la alcaldía de este municipio controlado por la delincuencia, se registró ayer cerca de las 20:00 horas, sobre un camino de terracería en el punto conocido como La Grupera, indican reportes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
Los informes refieren que la víctima estaba al interior de una camioneta y presentaba “múltiples” impactos de bala en la cabeza. Mientras autoridades ministeriales embalaron casquillos calibre .9 milímetros.
Esta mañana, la diputada local por MC, Magdalena Camacho condenó el crimen del dirigente de este partido en el municipio de Quechultenango, y vinculó la ejecución a motivaciones de tipo político.
“A donde vamos a parar con esta descomposición social, donde al adversario político se le elimina con las balas. Descansa en paz compañero Armando Arturo López Solano”, expresó la legisladora en su cuenta personal de Facebook.
Reportes del gobierno federal y estatal advierten que el municipio de Quechultenango es considerado como bastión del grupo delictivo Los Ardillos, que presuntamente dirige la familia del dirigente perredista Bernardo Ortega Jiménez.
Incluso, ayer en el noticiero de Televisa que conduce Denise Mearker se difundió una ficha de la Secretaría de Gobernación, que mostró imágenes del rostro de los líderes de Los Ardillos, Celso La Vela y Jorge El Barco Ortega Jiménez, hermanos del expresidente del Congreso local en la pasada legislatura y actual dirigente del PRD, Bernardo Ortega.
En la nota de Televisa, el vocero del gobierno estatal, Roberto Álvarez Heredia, asegura que el grupo criminal de Los Ardillos, cuyo bastión se encuentra en el poblado de Tlanicuilulco, municipio de Quechultenango, son los responsables de la ola de violencia en Chilapa y otras zonas de la región Centro como Chilpancingo.
Los informes de las autoridades estatales indican que Los Ardillos mantienen una alianza con la autodefensa de la UPOEG y el denominado Cártel del Sur en su lucha contra el grupo antagónico de Los Rojos o Los Jefes, por el control de las zonas de producción y trasiego de heroína en la región Centro donde han sido exhibidos presuntos nexos de políticos, así como autoridades civiles y militares con el narco.
