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CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán “no se va a declarar culpable y no va a colaborar con las autoridades”, aseguró el abogado del capo, Eduardo Balarezo, al responder a reportes sobre una posible colaboración con el gobierno de Estados Unidos.
Además, la defensa del sinaloense demandó al juez que el proceso contra su cliente sea celebrado en la Corte Federal de Manhattan y no en la Corte de Brooklyn, en virtud de que su traslado sería mucho más simple, ya que sólo debería atravesar un túnel que va de la cárcel al tribunal para llegar diariamente a su juicio, precisó.
Los abogados del capo, encarcelado desde hace año y medio en Nueva York, quieren que la Fiscalía entregue la evidencia que está en su poder y que presuntamente demostraría que el acusado no era el jefe máximo del cártel de Sinaloa.
El Chapo enfrenta cargos por 17 delitos, incluido ser líder del cártel de Sinaloa durante 25 años y transportar al menos 200 mil kilos de cocaína a Estados Unidos. Si es hallado culpable podría ser condenado a cadena perpetua.
Su defensa considera que la evidencia de la Fiscalía estadunidense exculparía al narcotraficante del mayor cargo en su contra, antes del juicio que debe comenzar el próximo 5 de septiembre.
“Eso es fundamental para la defensa de él; sin eso no lo vamos a poder defender”, sostuvo ante periodistas Eduardo Balarezo al concluir la audiencia de este martes.
Por su parte, la fiscal del caso, Andrea Goldbarg, aseguró que no importa si “El Chapo” era un jefe de mediano rango o un jefe máximo del cártel.
Actualmente, cada vez que el capo debe ir a la corte, las autoridades cierran el puente de Brooklyn, instalan una caravana policial de unos 10 carros blindados y ambulancias y helicópteros. Por ello, la defensa ha solicitado que el proceso contra su cliente sea celebrado en la Corte Federal de Manhattan.
El juez Brian Cogan dijo que aún precisa tiempo para estudiar estas mociones y fijó la próxima audiencia para el 14 de agosto.
Desde que fue extraditado a Estados Unidos, el 19 de enero de 2017, sus abogados han protestado por su aislamiento casi extremo y aseguran que su salud se ha deteriorado.
En esta audiencia, pidieron que un psiquiatra pueda visitarlo para ajustar la dosis de su medicación.
El juez estima que el proceso, que analizará unas 300.000 páginas de evidencia, durará unos cuatro meses.