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Ciudad de México. México está en el nivel más bajo de América Latina en cuanto a la integración de mujeres en los consejos de administración de las empresas, pues mientras en Brasil la participación de las mujeres en la dirección de las principales compañías es de 6.4 por ciento, de 7.8 en Chile, y 16.2 por ciento en Colombia, en el país apenas representa el 6.1 por ciento, dijo la tesorera de la federación Irene Espinosa Cantellano.
La funcionaria aseguró que la participación de las mujeres en las empresas no es un tema de género sino de negocios, pues aseguró que de acuerdo con diversos estudios, la participación de las mujeres en los negocios aumenta la rentabilidad financiera y la innovación, mejora la gobernanza, incrementa la competitividad, genera un mayor aprovechamiento del talento y crea un ambiente laboral inclusivo y propicio, lo que se traduce en beneficios económicos.
Durante su ponencia en el foro ‘La inclusión económica de la mujer, una buena práctica internacional para incrementar la rentabilidad’ organizado por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Espinosa Cantellano explicó que las mujeres enfrenta barreras formales e informales para acceder a posiciones de poder a nivel corporativo.
Respecto a las primeras, dijo que prevalece un andamiaje jurídico obsoleto, con una ley laboral que sólo contempla jornadas laborales fijas e inflexibles sin dar pie a una nueva realidad que existe hoy con la presencia de tecnología y nuevas formas de trabajo.
En ese sentido agregó que también siguen existiendo reglas en donde el ascenso o las promociones se siguen dando por antigüedad y no por talento. No obstante consideró que la parte más difícil son las barreras informales, porque son barreras tanto invisibles como inconscientes.
“Tenemos una sociedad muy tradicionalista con roles preasignados específicos, en donde el hombre se le sigue asignando el papel del proveedor y a la mujer el de la cuidadora de hijos, enfermos abuelos, etcétera. Hay una carga de la sociedad respecto de una especie de abandono de los hijos para aquellas madres que están trabajando”.
Sin embargo comentó que el problema no es exclusivo de México sino que tiene presencia a nivel mundial “incluso en Europa del norte hay una participación de mujeres en consejos de administración de 33 por ciento”.
No obstante señaló que en la región latinoamericana el promedio de participación es de apenas 7.3 por ciento, lo que la sitúa por debajo de regiones como Europa central, África y Asia pacífico.
“En 11 años, de 2005 a 2016 solamente hemos incrementado 2.2 puntos porcentuales la participación de mujeres en consejos de administración. Si esto lo comparamos con otras regiones como Asia pacífico que aumentó 3 por ciento en 3 años o Australia que aumentó 18 por ciento en 7 años nos pone en evidencia del problema en el que estamos”, apuntó.
La tesorera de la federación refirió que de acuerdo con el índice global de brecha de género del Foro Económico Mundial México se encuentra en la posición 66 de 144 países y en lo que respecta a la participación en las principales empresas de América Latina 50 por ciento no tienen ni una mujer en su consejo de administración.
En el mismo foro, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, aseguró que la inclusión de las mujeres en la economía tiene potencial para el desarrollo nacional, pues si participaran en igual proporción que los hombres para 2025 el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) alcanzaría un crecimiento del 26 por ciento.
