Estas son las propiedades anticancerígenas de los cacahuates que los convierten en una de las botanas más saludables

Consumir con moderación esta botana fortalecerá tu sistema inmunológico

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Los cacahuates, también conocidos como maníes, han sido estudiados en la alimentación debido a sus numerosos beneficios para la salud, incluida su capacidad para combatir y prevenir ciertos tipos de cáncer. Este fruto seco, más allá de ser una botana deliciosa y nutritiva, posee propiedades anticancerígenas que los convierten en un complemento importante para una dieta equilibrada.

Una de las propiedades anticancerígenas más destacadas de los cacahuates es su alto contenido de antioxidantes. Los cacahuates son una rica fuente de antioxidantes, como el resveratrol, la coenzima Q10 y los polifenoles, especialmente el ácido p-cumárico y el ácido oleico. Estos compuestos desempeñan un papel crucial en la neutralización de los radicales libres en el cuerpo, moléculas que pueden dañar las células y son una causa conocida de varios tipos de cáncer. El resveratrol, en particular, ha sido objeto de estudios que sugieren su capacidad para inhibir el crecimiento de células cancerosas en múltiples tipos de cáncer, incluidos el gástrico, el colorrectal, el de mama y el de próstata.

Cacahuates con sal (Getty Images)

Además, los cacahuates son una excelente fuente de fitoesteroles, especialmente el beta-sitosterol. Los fitoesteroles son compuestos vegetales cuya estructura química se asemeja al colesterol. Estudios han demostrado que los fitoesteroles pueden inhibir la absorción del colesterol en el intestino, pero más allá de esto, también se ha investigado su capacidad para reducir el riesgo de cáncer. Los fitoesteroles parecen interferir con el crecimiento de las células cancerosas, inducir su muerte y limitar la propagación de tumores.

Los cacahuates también son ricos en nutrientes esenciales que tienen propiedades anticancerígenas. Cabe resaltar el magnesio, el cobre, el fósforo, el potasio y las vitaminas E y B, incluida la niacina. La vitamina E es un antioxidante que protege las células del daño que puede conducir al desarrollo de cáncer. Por su parte, la niacina ha sido asociada con la reducción del riesgo de cáncer, especialmente de aquellos relacionados con el sistema digestivo.

El consumo regular de cacahuates se ha vinculado con un menor riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer. Un estudio publicado en la revista “Cancer Medicine” encontró que los participantes que consumían cacahuates al menos dos veces a la semana tenían un riesgo significativamente menor de cáncer de colon. Esto se atribuye a la sinergia de todos los nutrientes y compuestos bioactivos presentes en los cacahuates, que trabajan juntos para proteger contra el daño celular y reducir la inflamación, factores ambos relacionados con el desarrollo del cáncer.

Es importante mencionar que, aunque los cacahuates ofrecen estos beneficios anticancerígenos, su consumo debe ser moderado, especialmente para aquellos que puedan tener alergias al maní o preocupaciones respecto al contenido de calorías. Una porción recomendada de cacahuates es aproximadamente un puñado (28 gramos), que proporciona una cantidad significativa de nutrientes esenciales, sin excederse en calorías.

Maní listo para botanear(Crédito: Getty Images).

Finalmente, los cacahuates representan un ejemplo destacado de cómo la alimentación puede influir positivamente en la salud y prevenir enfermedades crónicas como el cáncer. No obstante, es crucial entender que ningún alimento por sí solo puede ofrecer protección total contra el cáncer. Una dieta equilibrada, rica en una variedad de frutas, verduras, frutos secos y semillas, junto con un estilo de vida saludable, son fundamentales para reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad. Los cacahuates, con sus propiedades anticancerígenas, son un complemento valioso en este enfoque dietético integral para la prevención del cáncer.