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Alejandro Reyes-Esparza Juárez, alumno de Preparatoria en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, obtuvo el nivel conocido como “ambassador” por parte de la NASA.
Dicho nombramiento le fue otorgado tras participar en el Space Camp de NASA en el que sólo cuatro de 320 jóvenes son elegidos a través de una prueba de selección donde se evalúan aptitudes físicas, cognitivas y desempeño académico. Éste, es el más alto nombramiento que se les otorga a participantes del certamen.
El Space Camp
Tiene el propósito de acercar a jóvenes estudiantes a las ciencias espaciales.
Alejandro junto con su hermana Cecilia, también estudiante de PrepaTec, visitaron las instalaciones del Space & Rocket Center en Huntsville Alabama, Estados Unidos para conocer más sobre el trabajo que realiza la NASA y sus recientes proyectos e investigaciones.
«Mis planes a futuro son, estudiar ingeniería mecatronica en el Tecnológico de Monterrey, llegar a tener una especialidad en aeronáutica en Embry-Riddle Aeronautical University , en un futuro, aplicar a trabajar a la NASA, aplicar a ser astronauta y para finalizar este camino, llegar a ser tripulante de la misión a Marte», dijo Alejandro en entrevista para El Financiero.
«Con el título de «Ambassador», puedo demostrarle a las personas de lo que yo soy capaz de poder hacer, nunca rendirme y siempre recordar que lo que llegue a lograr fue gracias a que no deje pasar la oportunidad», agregó.
Ser Ambassador de la NASA
Significa ser un estudiante con alto grado de capacidad de liderazgo y de conocimiento con respecto a STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matematicas).
Bajo el nombramiento de “Ambasador”, Alejandro recibió una preparación especial y trabajó en actividades como space shuttle, aviación, maniobra de jets de combate y retos de robótica, en donde puso a prueba su habilidad de programación.
“El amor por el espacio viene de familia, mi papá se dedica a la aeronáutica y un día llegó a casa con un mail en el que se informaba sobre este programa, y me animó a aprovechar la oportunidad” comentó el joven estudiante.
“Las aptitudes que el Tec me ha proporcionado, fueron pieza clave en esta selección, ya que muchas pruebas requirieron de liderazgo” mencionó.
Alejandro y su hermana Cecilia seguirán preparándose para la próxima edición, la joven añadió que su plan a futuro es obtener el mismo grado que tiene su hermano.
Solo 8 personas en el mundo al año tienen la oportunidad de recibir dicho nombramiento por parte de la NASA.
