Por Paty Aguilar
“Políticos” improvisados son los que gobiernan Nayarit y Bahía de Banderas, ni siquiera son capaces de contratar profesionales en la administración pública y en la política. Tanto el gobernador, Roberto Sandoval, como el presidente municipal de Bahía de Banderas, José Gómez Pérez, han sido omisos y negligentes en la búsqueda del bienestar social. Entre tantos hechos acontecidos a lo largo de sus mandatos, el más reciente, ocurrido en las playas de Sayulita, los pinta de cuerpo completo debido al evento masivo que se celebró en la playa Malpaso de Sayulita durante el fin de semana del periodo vacacional de Semana Santa Mayor, el cual, tuvo su peor día el Viernes Santo.
Según reportes ciudadanos de los lugareños, solo se instalaron en dicha playa 10 baños portátiles para dar el servicio a más de 3000 personas. Por supuesto, según comentan, los asistentes fueron a hacer sus necesidades en la selva, pero también aprovecharon la multitud para realizar acciones vandálicas todos lados, así como el esparcimiento de basura mientras que la PROFEPA se quedó con las manos cruzadas porque la autorización llego desde la autoridad municipal, estatal y federal, y es que estamos en manos de funcionarios que se coluden con los organizadores para que el negocio llegue también a sus bolsillos sin importarles las consecuencias.
Natural Experience 2017 en la Playa Malpaso de Sayulita que se celebró los días 14, 15 y 16 de abril, organizado por Moon Crystal, con el respaldo de Rave Love México, , resultó en un colapso total de ingobernabilidad: Los baños sucios, por supuesto los asistentes se fueron a la selva detrás de palmeras, árboles y piedras. Senderos entre Sayulita y Mal Paso llenos de basura y popos, según refiere la información proporcionada por el reporte ciudadano. La avenida del Palmar que pasa por primaria y termina en uno de los senderos a mal paso fue vandalizada desde el viernes que comenzó el rave (ni la primaria respetaron, pintaron fachadas de casas, autos, piedras, un árbol que dejaron horrible afectando el paisaje). El viernes Sayulita colapso desde el medio día; se calculaban más de 20000 personas, no había donde estacionarse, transito cerro la entrada de Sayulita (entrada del arco) y algunas personas se regresaron, otras pasaron a fuerzas, algunos percances entre automovilistas. El domingo la grúa que mando el ayuntamiento se fue, los habitantes descontentos.”
“La seguridad de los organizadores vestidos de naranja acosaban a los turistas pidiendo ensenaran su brazalete, si no lo traían los amedrentaban diciéndoles que no se acercaran al Rave cuando parte del evento está fuera del lote privado que rentan. En la foto se ve a uno de seguridad en zona federal cercana a las olas acosando a la gente. Las personas decían «la playa es pública» pero ellos argumentaban que el Rave era privado. Traían radios y era evidente que seguían de lejos a quien no tenía brazalete.
“PROFEPA fue antes y durante el evento. PROFEPA argumenta que el evento no está en zona federal, cuando está a simple vista las afectaciones al ecosistema y fauna silvestre por la exposición de desechos humanos al aire libre y por el ruido excesivo. Los habitantes de Sayulita cuentan las horas para que el Rave se termine. Son tres días y tres noches de ruido, casi 30 DJs. Vecinos intentaron hacer las denuncias correspondientes en página de PROFEPA la cual no sirve para tal efecto. Quien va a recoger la popo y basura de la selva? ¿El ayuntamiento, José Gómez, Tecate o Corona?. Venta ilegalmente permitida de alcohol en playa Sayulita y playa Mal Paso. Hace un año no había tanta venta de alcohol en playa, PROFEPA removió puestos, este año no fue así.”
Finalmente, el reporte ciudadano menciona que la promoción excesiva ganada después de la designación de Sayulita Pueblo Mágico, no era necesaria ya que Sayulita cada año tenía más turismo. La respuesta de tránsito, de turismo y del ayuntamiento no corresponde a su promoción excesiva. Sayulita sigue siendo un pueblo pesquero, pero ahora recibe un flujo masivo de turismo. Y la PROFEPA junto con la Marina fueron insuficientes para mover a campistas de Sayulita.