Por Mauricio Lira Camacho
NOTICIASPV
La colonia 5 de diciembre en el municipio de Puerto Vallarta, se encuentra totalmente llena de bardas algunas con graffiti y otras, con las insignias y los colores de propaganda política extemporánea.
Algunas vialidades como la calle Brasil, Colombia y Perú, entre otras, tienen esta lacerante imagen urbana que a diario soportan vecinos.
Muchos de ellos han cuestionado si existe un marcado interés de la autoridad municipal, cuya alcaldía recae en la persona de Arturo Dávalos Peña, de mejorar el entorno, la carta de presentación de Puerto Vallarta ante el mundo, por que no empezar por la limpieza integral de las colonias ubicadas en el primer cuadro del destino.
Una de estas, corresponde a la colonia 5 de diciembre por la que caminan turistas y residentes extranjeros quienes han adoptado a esta ciudad como su hogar, no solamente para vacacionar.
Muy cerca del único cine que se ubica en esta colonia, en donde hoy en día se realizan festivales locales de música, la terminal camionera de los Medina y en donde aparacen ya tiendas de conveniencia, hay bardas afectadas.
Por ejemplo, en varias de estas bardas se observan todavía los colores verde, blanco y rojo, acompañando leyendas de propaganda del actual goebrnador de Jalisco, Aristóteles Sandoval.
En otras, aparece la leyenda de un Peri Cuevas, actual regidor de movimiento ciudadano, con alusiones a una campaña pasada.
Cabe destacar que en tiempos de campañas, los candidatos y candidatas abusan en el uso de las bardas para usarlas y plasmar con ideas y frases sus propuestas en aras de ganar adeptos en la ciudadanía.
En algunos anteriores procesos electorales, representantes de partidos políticos firman convenios de cooperación, para que después de terminada la jornada electoral y con pleno conocimiento de quien haya ganado, todos en su conjunto deben limpiar la imagen de Puerto Vallarta.
Muy pocos lo han hecho, la muestra es que a la fecha existen casas con bardas en donde se observan rostros y frases pintadas de procesos electorales ya pasados.
Esta lamentable inagen urbana va de la mano con el graffiti que se observa en otras bardas, delito que cometen jóvenes vándalos, quienes no respetan espacios públicos pese a las advertencia de las propias autoridades municipales.