El descubrimiento fue en una mina de Karowe, en Botsuana gracias al empleo de tecnología de transmisión de rayos X por parte de la compañía canadiense, utilizada desde 2017 por Lucara para identificar y preservar diamantes grandes y de alto valor.
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MADRID, (EUROPA PRESS) – La compañía minera canadiense Lucara Diamonds anunció el hallazgo de un diamante «excepcional» de 2.492 quilates en su mina de Karowe, en Botsuana, lo que convierte a la piedra en la mayor recuperada desde el diamante Cullinan de 3.106 quilates, encontrado en Sudáfrica en 1905 y cortado en distintas piezas separadas, varias de las cuales forman parte de las joyas de la Corona Británica.
La recuperación de la piedra, «uno de los diamantes en bruto más grandes jamás desenterrados», fue posible gracias al empleo de tecnología de transmisión de rayos X por parte de la compañía canadiense, utilizada desde 2017 por Lucara para identificar y preservar diamantes grandes y de alto valor.
En este sentido, Lucara Diamonds destacó que el hallazgo subraya la reputación de Karowe como un activo de clase mundial, recordando que esta última recuperación se suma a otras en la mina de Botsuana, incluyendo el diamante Sewelô de 1.758 quilates y el Lesedi La Rona de 1.109 quilates.
«La capacidad de recuperar intacta una piedra tan grande y de alta calidad demuestra la eficacia de nuestro enfoque de recuperación de diamantes y nuestro compromiso de maximizar el valor para nuestros accionistas y partes interesadas», afirmó William Lamb, presidente y consejero delegado de Lucara.
A pesar de la que minera canadiense evitó ofrecer una estimación del valor de la piedra, fuentes próximas a Lucara han indicado a ‘Financial Times’ que el diamante podría valer más de 40 millones de dólares (36 millones de euros).
Las acciones de Lucara Diamonds, que llegaron a escalar hasta más de un 90% en la apertura de la Bolsa de Toronto, aunque a medida que avanzaba la sesión reducían la subida a alrededor del 40%.