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HSBC e IMSS perjudican a cuentabientes y derechohabientes

Pago de impuestos, jubilaciones y prestaciones

Al final, quienes salen perdiendo son los cuentabientes y derechohabientes.

Aquellos ciudadanos que acuden a ambas instituciones, para realizar pagos de M 40 y otros respecto a jubilaciones y pensiones, van y vienen del banco HSBC y del Seguro Social, sin que nadie les de razón de la confusión que tienen en sus sistemas digitales.

Además de los problemas de estacionamiento, salen a relucir largas caminatas entre ambos lugares bajo los fuertes rayos del sol.

Exigen explicación varios de los ciudadanos quienes llevan meses bajo estos procedimientos.

La falta de coordinación entre el banco HSBC y el Seguro Social ha generado un creciente malestar entre los jubilados y pensionados en la ciudad.

Muchos de ellos han expresado su frustración al enfrentar complicaciones en el proceso de pago de impuestos, lo que ha resultado en retrasos y confusiones que afectan su economía y tranquilidad.

Esta situación ha llevado a que un número significativo de ciudadanos se sienta desamparado, al depender de un sistema que parece no funcionar adecuadamente.

Los pensionados han señalado que la falta de comunicación entre ambas entidades ha creado un ciclo de incertidumbre.

A pesar de ser personas que han dedicado gran parte de su vida al trabajo, se enfrentan ahora a obstáculos que complican su situación financiera.

La necesidad de pagos puntuales es crucial para muchos de ellos, y la actual disfuncionalidad en los procesos ha incrementado su ansiedad, lo que ha llevado a un llamado a las autoridades para que actúen y busquen soluciones efectivas.

Ante esta problemática, la comunidad ha comenzado a organizarse para expresar sus quejas y exigir una respuesta.

Los ciudadanos están buscando una mayor transparencia y atención por parte de ambas instituciones, con la esperanza de que se implementen mejoras que faciliten los trámites relacionados con sus pensiones.

La indignación colectiva subraya la importancia de que HSBC y el Seguro Social trabajen de manera coordinada para garantizar que los derechos de los jubilados y pensionados sean respetados y protegidos.

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