«nos engañaron», queja de maestros y padres de familia
«Nos citaron para avances de taller y resultó un informe de dependencia municipal de MORENA», lamentan padres de familia y maestros, quienes se quejaron en redes sociales.
«Era ver avances de un taller de nuestros hijos, pero nadie nos dijo nada que se trataba de un informe de actividades de una dependencia municipal del gobierno que está a punto de salir».
Padres de familia explotaron en las redes sociales, «nosotros casi nunca publicamos este tipo de cosas».
«Sin embargo, en está ocasión lo amerita, recientemente nos citaron a un evento a mis hijos donde presentarían los avances de su taller de canto y la sorpresa fue que era un gancho para dar el informe final de una dependencia municipal que duró casi dos horas».
«Cabe mencionar que los maestros no tenían idea de esto, por lo cual nos citaron y accedimos».
Pero el problema no fue la perdida de tiempo, ni el fastidio de escucharlo, sino que cuando ya toca el turno de que los alumnos participarán, los políticos y los demás directores que engrandecían el evento, se fueron.
No tuvieron la educación para quedarse a disfrutar y ver el trabajo por el cual fueron convocados los niños y los papás.
«No cabe duda, que en la política falta un mucho de empatía y educación», concluyeron.
Los padres de familia y maestros de una escuela en Puerto Vallarta se reunieron con la esperanza de asistir a un evento que prometía destacar los logros artísticos de sus hijos.
La invitación había despertado entusiasmo, ya que muchos esperaban ver las obras de arte y las presentaciones que los estudiantes habían estado preparando con tanto esfuerzo. Sin embargo, al llegar al lugar, pronto se dieron cuenta de que habían sido engañados.
La sala estaba decorada con carteles que anunciaban las actividades de una dependencia municipal, lo que desató la confusión entre los asistentes.
Los padres, que habían imaginado un espectáculo lleno de creatividad y talento, se encontraron frente a un informe sobre programas y políticas del gobierno local.
La decepción se convirtió rápidamente en frustración, y murmullos de descontento comenzaron a llenar el ambiente. Muchos padres se preguntaban cómo había sido posible tal confusión y quién había sido el responsable de este cambio inesperado.
Los maestros, por su parte, se sintieron igualmente traicionados.
Habían trabajado arduamente para preparar a sus estudiantes para lo que creían que sería una celebración de su esfuerzo y dedicación.
En lugar de ver a sus alumnos brillar en el escenario, se encontraron sentados en una reunión que parecía carecer de relevancia para la comunidad escolar.
La falta de comunicación y la falta de respeto hacia los esfuerzos artísticos de los niños generaron un sentimiento de indignación entre el personal docente.
Con el tiempo, la molestia de padres y maestros se transformó en un llamado a la acción. Decidieron organizar una reunión para expresar sus preocupaciones y buscar respuestas sobre lo sucedido.
La comunidad educativa unida por un mismo propósito, se comprometió a garantizar que los logros artísticos de los estudiantes recibieran el reconocimiento que merecían.
Así, la experiencia, aunque decepcionante, se convirtió en un catalizador para fortalecer la colaboración entre padres, maestros y la administración escolar, asegurando que eventos futuros fueran verdaderamente celebraciones del talento juvenil.