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El llamado reto de ‘la ballena azul’ ―un juego mortal propagado en las redes sociales― cuenta con una serie de desafíos donde los adolescentes son incitados a cortarse el brazo con una navaja, ver películas de terror sin parar o saltar desde una gran altura para quitarse la vida. Concretamente en Ciudad de México, gracias a las denuncias de la comunidad y la intervención adecuada de la policía, se han detectado 2 casos a tiempo, previniendo la muerte de los menores.
«Convocan a chicos, principalmente en un rango de edad de nivel secundaria, es decir, de 13 a 17 años y los invitan a formar parte de estos grupos organizados para realizar un conjunto de retos durante 50 días», explica a RT Juan Carlos Montesinos, director de la unidad de Ciberdelincuencia preventiva de la Ciudad de México.
El mentor que guía a los jóvenes en redes sociales tiene una gran influencia sobre ellos, forzándolos a terminar todos los retos. De lo contrario, los usuarios son amenazados. «Se tiene información sobre su familia, sobre dónde estudian, sobre cuáles son sus círculos, etc. Y entonces existe una amenaza de divulgar algún tipo de información o amenazar a la familia si no se continúa como tal con los retos», afirma Montesinos.
¿Por qué proliferan este tipo de juegos?
Imagen Ilustrativa’Grupos de la muerte’: quiénes y cómo inducen a los niños rusos al suicidio en Internet
No es la primera vez que circulan este tipo de juegos. Como ejemplo está el ‘choking game’, en donde los menores se asfixian para provocarse un desmayo. Esta tendencia se popularizó en EE.UU. y se estima que ha dejado decenas de víctimas en los últimos años.
«Empieza a haber un acercamiento a este tipo de juegos porque lo que buscan los pequeños es ser vistos por otros, el poder tener toda una serie de aceptación social que muchas veces puede estar negada en su entornos más próximos», afirma Tania Acosta, doctora en comunicación.
Asimismo, la experta destaca que es importante que el entorno del menor esté pendiente de una serie de alertas para detectar su posible participación en estas actividades mortales: «los chicos empiezan a dormir poco, empiezan a descuidar toda una serie de actividades que son importantes, empiezan incluso a aislarse socialmente, no platican con los padres ni con los hermanos».
Contrapeso
La policía mexicana también ha utilizado los medios de difusión de Internet para compartir mensajes de alerta sobre cómo hacer frente a retos nocivos como este, y autoridades y expertos insisten en que debe haber una buena comunicación con los adolescentes y una educación adecuada sobre cómo usar las redes sociales para prevenir que busquen dichos juegos.
Además, existen otras formas de contrarrestar los juegos suicidas en Internet. Por ejemplo, en Brasil ha nacido una página web llamada ‘la ballena rosa’ con desafíos positivos diarios que buscan enseñar a los niños a amar la vida. También existe ‘la ballena verde’, compuesta por retos que motivan a los menores a hacer tareas en el hogar y a ser responsables. Estos esfuerzos pueden ayudar a los jóvenes a ver Internet de diferente manera y con un clic, y salir victoriosos de las redes sociales, que se han convertido en un campo de batalla.
Por su parte, Rusia analiza modificaciones legislativas para tratar estos casos. Sobre ello hemos conversado con el director de la liga de seguridad de Internet, Denis Davidov, quien destaca que gracias a estas iniciativas se podrá «castigar» a los incitadores de estos crímenes, pues hasta ahora no figuraba este tipo de delitos en el código penal ruso.
