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ROMA (apro).- De gira por Italia para apoyar a los partidos ultraderechistas, con el fin de que conquisten el Parlamento Europeo en mayo próximo, Steve Bannon, exjefe de asesores del presidente estadunidense Donald Trump, no se olvidó de México, país que, dijo, está gobernado por un presidente “populista”.
“No hubiéramos logrado (mantener el acuerdo comercial del) NAFTA si no hubiese estado el nuevo presidente populista”, afirmó Bannon el pasado martes 26 en Italia, en referencia al nuevo acuerdo comercial que ha sido rebautizado en inglés con las siglas USMCA y que fue pactado entre Estados Unidos, México y Canadá en octubre pasado.
“La clave de ese acuerdo era asegurarse que China no pudiese entrar en el sistema a través de México, y creo que (Andrés Manuel) López Obrador fue esencial para esto”, añadió el ultraderechista, en una larga conferencia de prensa en la Asociación de la Prensa Extranjera de Roma.
Durante el encuentro, que duró más de dos horas y en el que no faltaron momentos de tensión con la prensa, Bannon (Norfolk, 1953) profundizó en su visión sobre el actual estado de las relaciones mexico-estadunidenses y volvió a defender la construcción de un muro antiinmigrantes entre ambos países, e incluso criticó al Papa Francisco por oponerse a la barda y hablar a favor de los inmigrantes.
La firma del acuerdo comercial entre México y Estados Unidos es la prueba de que la relación entre Trump y López Obrador es “fuerte”, dijo Bannon, al establecer una línea directa entre esta alianza y la que mantienen el partido populista del Movimiento Cinco Estrellas (M5S) y la ultraderechista Liga en Italia, país que considera pionero en Europa por su viraje hacia políticas más restrictivas hacia la inmigración.
La de México y Estados Unidos “es una relación fuerte… incluso desde antes que él (López Obrador) tomara posesión”, opinó.
“No sólo soy un gran defensor de la (construcción) del muro (entre México y Estados Unidos), sino que también creo que se debería construir lo más pronto posible. Creo que necesitamos esta solución para que podamos detener a los cárteles, no sólo a los de la droga, sino también a los que trafican con seres humanos”, añadió, volviendo a repetir uno de sus argumentos más recurrentes.
Francisco, el enemigo
En el encuentro, Bannon también respondió a una pregunta sobre el Papa Francisco, un actor internacional que en reiteradas ocasiones ha defendido una cultura de puentes, y en 2016 incluso pronunció una emotiva misa en Ciudad Juárez, Chihuahua, en la frontera de México con Estados Unidos, que fue escuchada por centenares de fieles de ambos países.
“El Papa… es el vicario de Cristo en la tierra. No obstante, cuando va y habla de política, eso no tiene nada que ver con la teología y la Iglesia católica. El Papa ha sido constante en (decir) que todos los problemas del mundo se deben a los movimientos nacionalistas y a los populistas… debería dejar de poner el énfasis en ciudadanos libres. Debería empezar a concentrarse en el cáncer de la Iglesia católica”, abundó, en un confuso discurso en el que ligó sus críticas a los escándalos de pederastia que afectan a la Iglesia católica.
“En Estados Unidos, los fiscales generales han abierto casos judiciales en todos los 50 estados. La estructura física de la Iglesia en Norteamérica pronto será liquidada”, argumentó. “El Papa debería dejar de criticar a Trump y empezar a preocuparse por la crisis de la Iglesia católica”, insistió.
Estados nación
El exestratega en jefe de Trump también dijo que espera que de las elecciones europeas salga un tablero político trastocado, que acabe para siempre con la idea de convertir la Unión Europea en los Estados Unidos de Europa, para que surjan “unos Estados-nación reforzados”.
“Ahora existe una narración alternativa”, zanjó, en referencia a la retórica de las formaciones ultraderechistas que él apoya en Europa.
“Esto es lo que estos partidos quieren: una Europa de las Naciones. Vivimos un tiempo en el que en Europa hay una alternativa, ya no es sólo la visión de (el presidente de Francia, Emmanuel) Macron o el caos, la idea de una UE integrada o nada”, argumentó el estadunidense.
Por ello, en la campaña electoral para las elecciones europeas colaborará con “10-12 partidos”, entre ellos el español Vox, el húngaro Fidesz (cuyo líder es el primer ministro de ese país, Viktor Orbán) y el alemán Alternativa para Alemania (AfD, por sus siglas en alemán). Asimismo, ayudará a “algunos partidos balcánicos” y a la Liga de Matteo Salvini, actual ministro de Interior italiano. Este último, junto con el nuevo presidente brasileño Jair Bolsonaro, son actualmente los líderes “más poderosos en el escenario mundial”, apuntó Bannon.
“Italia es ahora el epicentro del universo político de Europa”, recalcó el jefe de asesores de Trump, quien acudió a la rueda de prensa acompañado por Benjamín Harnwell, responsable de la academia europea para populistas de derecha que Bannon pretende (desde hace más de un año) abrir en Italia.
Impacto en la derecha española
En cuanto al partido español Vox, aseguró que la formación española contactó con él en el verano de 2017. “Soy un gran admirador de Vox. Su logro más importante ha sido empujar al resto de los partidos de derecha hacia el bando del populismo nacionalista y soberanista”, comentó.
“Han tenido un impacto extraordinario en la política” española, opinó, al afirmar que “en las próximas dos semanas” viajará a España para reunirse con este partido. “Fui invitado”, aclaró.
“Ninguno de estos partidos me necesita para ganar” las elecciones europeas porque son “mucho más sofisticados, incluso de los que existen en Estados Unidos”, señaló Bannon, cuyo activismo provocó en meses pasados el malestar tanto de Salvini como de la francesa Marine Le Pen, líder de Rassemblement National.
“Yo lo que puedo hacer por ellos es lo que hice por Trump; es decir, contarles simplemente que pueden ganar si mantienen su mensaje”, dijo al puntualizar que próximamente también se reunirá con Le Pen en Francia.
Luego sostuvo que no cobra por sus servicios. “Yo esto no lo hago profesionalmente. Lo hago gratis, sin cobrar”.
El objetivo de Bannon es un escenario que él ve posible. Los populistas de derecha “podrían suponer la mitad de la presencia total del Parlamento Europeo” después de mayo, afirmó, al descartar, eso sí, su liderazgo en la campaña electoral de Trump para las presidenciales estadunidenses de 2020.