Su llegada a Nueva York, escoltado por agentes del FBI y la DEA, marca un hito en la cooperación entre ambos países en la lucha contra el narcotráfico.
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En un hecho sin precedentes, México extraditó a Rafael Caro Quintero a Estados Unidos, marcando un momento clave en la lucha contra el narcotráfico. Conocido como el «Narco de Narcos», el exlíder del Cártel de Guadalajara fue entregado junto con otros 28 individuos vinculados al crimen organizado.
Caro Quintero fue uno de los fundadores del Cártel de Guadalajara y es señalado como el autor intelectual del secuestro y asesinato del agente de la DEA Enrique «Kiki» Camarena en 1985. Tras su captura en 1985 y su liberación en 2013 por un tecnicismo legal, fue recapturado en julio de 2022 en Sinaloa. Estados Unidos había solicitado su extradición durante años y finalmente, tras más de tres décadas, lo tiene bajo su custodia.
Las imágenes del momento muestran a Caro Quintero descendiendo de un avión en Nueva York, escoltado por agentes del FBI, US Marshals y la DEA. Su entrega es vista como un mensaje contundente del gobierno mexicano a las autoridades estadounidenses, en un contexto de presiones de la administración de Donald Trump para reforzar las acciones contra el narcotráfico.
Estados Unidos esperó 30 años para lograr su extradición y ahora la Fiscalía estadounidense busca condenarlo a la pena de muerte, junto con los hermanos Miguel Ángel y Óscar Omar Treviño Morales, exlíderes del cártel de Los Zetas, y otros 25 criminales de alto perfil.
Además de Caro Quintero, entre los extraditados figuran Antonio Oseguera Cervantes, hermano del líder del Cártel Jalisco Nueva Generación. Se espera que enfrenten juicio en tribunales federales de Estados Unidos por diversos delitos relacionados con el tráfico de drogas y el crimen organizado.
La entrega de Caro Quintero a Estados Unidos es un hito en la cooperación bilateral en seguridad y un golpe significativo contra el narcotráfico.