Alfonso Pérez Miramontes y Oswaldo Beatriz Oropeza lideran el cambio en la estrategia de comunicación municipal, enfrentando retos y controversias mientras buscan revitalizar la imagen de Luis Alberto Michel Rodríguez, alcalde de esta ciudad.
En un giro inesperado en la escena de la comunicación social en el gobierno municipal de Puerto Vallarta, Alfonso Pérez Miramontes y Oswaldo Beatriz Oropeza emergen como los nuevos líderes, asumiendo roles clave tras la separación de Pedro Castillo.
Pérez, reconocido por su pericia comercial en Guadalajara, toma las riendas como director de Comunicación Social. Mientras tanto, Beatriz, conocido como «El Grandote» y presuntamente vinculado a «La Covacha», un negocio de comunicación relacionado con Enrique Alfaro, de Movimiento Ciudadano, dirigirá la estrategia en redes sociales, buscando revitalizar la imagen del presidente municipal, Luis Michel Rodríguez.
Pérez Miramontes, aunque no destaca por credenciales periodísticas excepcionales, se presenta como un hábil negociante en el ámbito de la comunicación. Por otro lado, Beatriz genera controversia, especialmente por un comentario despectivo en la red social X dirigido a la Secretaria General de Morena, Citlalli Hernández Mora.
Este nuevo equipo ya ha dejado su marca en los eventos municipales, orientando al equipo de Comunicación Social y anunciando cambios en su estructura. La inclusión de Beatriz plantea preguntas sobre la alineación del equipo con la 4T, y sus comentarios despectivos previos generan cuestionamientos sobre la ética que guiará su gestión en las redes.
Este capítulo inédito en la comunicación local destaca la complejidad y las distintas caras de quienes liderarán la estrategia comunicativa en Puerto Vallarta.