Oro de juventud y potasio: cómo preparar una gelatina de dulce de camote rica en colágeno

Este postre destaca por ser muy sencillo y por su contenido nutritivo lleno de beneficios para la salud gracias a las múltiples propiedades que aportan sus ingredientes

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El camote es un tubérculo muy versátil en la cocina y se utiliza en una amplia variedad de platillos que abarcan desde sabores dulces hasta salados pero más allá de su valor culinario, también es reconocido por sus propiedades medicinales.

Al mezclarse con la gelatina que es un postre altamente reconocido por la presencia de colágeno, sus propiedades aumentan, pues, de acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, este tubérculo contribuye a la prevención de diversas afecciones, como la presión arterial alta, el estrés, la diabetes, la anemia y las hemorragias.

Además, señala que es una fuente rica en nutrientes esenciales como vitaminas, minerales, entre ellos el potasio, y antioxidantes que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y a mejorar la salud en general. Su consumo regular puede ser una herramienta eficaz para combatir enfermedades crónicas y promover el bienestar, por lo que este postre además de ofrecer un manjar al paladar, le proporciona los nutrientes necesarios para fortalecer el sistema inmune.

México se considera un centro clave de diversidad genética del camote según organizaciones agrícolas nacionales. (Imagen Ilustrativa Infobae)

La receta fue compartida en cookpad y aparte de dar al organismo varias propiedades, es un postre muy fácil de hacer que además adquiere el sabor de las especias como la canela y se endulza aún más con el toque del piloncillo.

• 2 camotes cocidos con un poco de agua, canela y piloncillo
• 1 barra queso crema
• 1 lata leche condensada
• 1 lata leche evaporada
• 4 cucharadas grenetina
• 1 taza leche fresca
• 1/2 taza agua para hidratar la grenetina

• El proceso para elaborar este postre de camote con grenetina comienza con un paso esencial: hidratar la grenetina en agua y luego calentarla a baño María hasta que se vuelva líquida. El procedimiento es clave para lograr la textura adecuada del postre y este paso debe realizarse antes de mezclar los ingredientes principales, por lo que debe asegurarse de que la grenetina esté lista para integrarse de manera uniforme en la preparación
• Posteriormente se deben pelar los camotes previamente cocidos y se cortan en trozos pequeños. Este detalle facilita su incorporación en la licuadora, donde se mezclarán con los demás ingredientes
• Paralelamente, se deben colocar cuatro cucharadas de grenetina en media taza de agua para que se hidrate. Una vez que la grenetina absorbe el agua, el siguiente paso es calentarla a baño María hasta que alcance una consistencia líquida
• Es importante dejarla enfriar antes de añadirla a la mezcla principal
• El siguiente paso en la preparación del dulce de camote implica combinar todos los ingredientes en una licuadora
• Mientras la mezcla se licúa, se debe agregar la grenetina líquida en un chorro delgado y de manera gradual. Este método asegura que la grenetina se distribuya uniformemente, evitando grumos y garantizando una textura homogénea en el postre final
• Una vez que todos los ingredientes han sido mezclados y la grenetina se ha incorporado correctamente, la preparación debe verterse en un molde
• Se lleva al refrigerador, donde debe permanecer durante aproximadamente tres horas. Este tiempo de enfriamiento permite que la mezcla se solidifique y adquiera la consistencia deseada
• Finalmente, el postre se desmolda y está listo para disfrutarse

Estudios arqueológicos revelan que el camote ha formado parte de la dieta humana desde hace entre 4 mil y 8 mil años. (Imagen Ilustrativa Infobae)

La diversidad genética del camote en México destaca como un recurso invaluable tanto para la alimentación como para la cultura del país, pues, de acuerdo con el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas, es considerado un centro de diversidad de la sección Batatas, a la cual pertenece la especie Ipomoea batatas, conocida popularmente como camote.

Este cultivo posee una historia que se remonta a miles de años atrás aunque se encuentra pobremente representado en los herbarios y bancos de germoplasma nacionales, lo que plantea desafíos para su conservación y aprovechamiento.

De acuerdo con información compartida por el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas, el camote tiene una relevancia histórica que se extiende más allá de las fronteras mexicanas.

Evidencias arqueológicas halladas en la costa peruana sugieren que este cultivo ha sido parte de la dieta humana desde hace entre 4 mil y 8 mil años. Sin embargo, es en Mesoamérica donde se concentra la mayor diversidad genética de esta especie, lo que subraya la importancia de la región en la evolución y domesticación del camote.