Sigue alcantarilla destapada
Existe un peligro latente tanto para peatones y conductores de autos, así como de motos, debido a la existencia de una alcantarilla destapada en un tramo de la calle inconclusa Montessori.
Desperfecto localizado en una esquina en donde confluye un conjunto habitacional privado.
Es zona de constante paso de peatones y vehículos.
En Puerto Vallarta, la reciente situación en la calle Montessori ha generado una creciente preocupación entre los residentes debido a la irresponsabilidad demostrada en la reparación de una alcantarilla destapada en un tramo cercano a un complejo habitacional privado. La alcantarilla, que lleva semanas sin cobertura, se ha convertido en un foco de inseguridad y malestar para quienes viven en la zona. La falta de acción por parte de las autoridades municipales para solucionar el problema ha sido percibida como una grave negligencia.
Los residentes del complejo habitacional, que se encuentra adyacente al área afectada, han expresado su indignación por la tardanza en abordar esta situación.
La alcantarilla destapada no solo representa un riesgo de accidente para los transeúntes y vehículos, sino que también plantea preocupaciones sobre posibles problemas de salud debido a la exposición de desechos y agua estancada.
La inacción del gobierno local ha sido vista como una muestra de despreocupación hacia la seguridad y bienestar de los ciudadanos.
El problema se agrava al observar que la reparación de la alcantarilla debería haber sido una prioridad debido a su ubicación estratégica y el impacto directo que tiene en los residentes del complejo habitacional.
La falta de una solución rápida y efectiva ha llevado a los residentes a cuestionar la eficiencia y el compromiso de las autoridades municipales con la gestión adecuada de los problemas de infraestructura.
La situación ha sido ampliamente discutida en reuniones comunitarias y foros locales, destacando la falta de responsabilidad y respuesta por parte de quienes deberían garantizar la seguridad pública.
A medida que el descontento continúa creciendo, los ciudadanos han comenzado a exigir una acción inmediata para remediar la situación.
La presión pública se ha intensificado, con llamados a las autoridades para que tomen medidas urgentes y aseguren una reparación adecuada y duradera de la alcantarilla.
Los residentes esperan que esta crisis sirva como un recordatorio de la necesidad de una gestión más eficiente y responsable en el mantenimiento de las infraestructuras urbanas, para evitar que problemas similares vuelvan a surgir en el futuro.
