Luego de que la Conferencia del Episcopado Mexicano informara de la desaparición del obispo emérito Salvador Rangel Mendoza, el sacerdote fue encontrado en Morelos, tras dos días sin saberse de su paradero.
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El obispo emérito Salvador Rangel Mendoza estuvo a cargo de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa del 2015 al 2022, y durante el tiempo que estuvo en Guerrero en ese encargo católico reconoció tener conversaciones con líderes de la delincuencia organizada para pacificar varias regiones de la entidad.
Polémico en sus declaraciones desde su llegada a Guerrero, Rangel Mendoza se autonombraba pacificador, es fraile Franciscano y durante su ejercicio eclesiástico hacía llamados constantes a la pacificación del estado y reconocía que se reunía con jefes de grupos de la delincuencia organizada de la entidad para buscar que hubiera paz en las zonas en conflicto.
La tarde de este martes, y por medio de un comunicado, la Conferencia del Episcopado Mexicano dio a conocer la desaparición del clérigo.