No hay cuidado de las autoridades competentes
Afuera de las tiendas comerciales, muchas de estas ubicadas sobre la banqueta de avenida México, colindante con el cetro histórico de Puerto Vallarta, desde muy temprano y pese a bajas temperaturas, personas discapacitadas salen para que la ciudadanía les otorgue dinero que les permita sobrevivir.
Esta mañana, algunos ciudadanos enviaron a #NoticiasPV, #NoticiasPuertoVallarta y #NoticiasPVNayarit, imágenes de un señor de edad avanzada, en silla de ruedas, al parecer carente de vista, que desde muy temprano, se coloca para recibir dinero de los peatones.
Piden ayuda de las autoridades competentes para que estas personas gocen de seguridad.
En Puerto Vallarta, una preocupación creciente es la protección de la integridad de las personas discapacitadas que se ven obligadas a pedir dinero en las banquetas, especialmente durante las mañanas con temperaturas bajas.
Estas personas a menudo se encuentran en situaciones vulnerables, expuestas a condiciones climáticas adversas y a riesgos de seguridad en las calles mientras buscan sustento.
Es crucial que las autoridades correspondientes tomen medidas para salvaguardar su bienestar y ofrecerles apoyo adecuado.
La exposición prolongada al frío puede tener graves repercusiones en la salud de las personas con discapacidad, especialmente aquellas que pueden tener sistemas inmunológicos comprometidos o condiciones médicas subyacentes.
Además, la falta de protección y seguridad en las áreas donde piden limosna puede dejarlas expuestas a situaciones de riesgo, como accidentes de tráfico o actos de violencia callejera.
Es imperativo que se implementen políticas y programas que brinden alternativas de sustento y refugio seguro para estas personas, especialmente durante los períodos de clima inclemente.
Las autoridades locales deben trabajar en colaboración con organizaciones de la sociedad civil y agencias de asistencia social para desarrollar soluciones sostenibles que aborden las necesidades específicas de las personas discapacitadas en situación de vulnerabilidad.
Esto podría incluir la provisión de refugios temporales, programas de capacitación laboral y acceso a servicios de salud y rehabilitación. Garantizar que estas personas reciban el apoyo adecuado no solo es una cuestión de protección de derechos humanos, sino también de justicia social y dignidad humana en Puerto Vallarta.