ElFinanciero.com.mx/ Claudia Ruiz Massieu, dirigente nacional del PRI, aseguró que en el tricolor saben de la urgencia de recomponerse. Por ello han tomado la decisión de renovar su dirigencia nacional con el voto directo de sus seis millones de militantes, a quienes convocarán a las urnas para definir a quienes relevarán a ella y a Arturo Zamora, para encabezar al partido durante los próximos cuatro años.
Así lo reveló en entrevista con El Financiero la dirigente priista, quien aclara que, de cara al 90 aniversario del partido, el próximo 4 de marzo, el PRI, en su calidad de oposición al actual gobierno federal y tras la derrota electoral del año pasado, también tiene la oportunidad de rehacerse.
“Si queremos seguir siendo protagonistas, estamos obligados no a pensar en el pasado, sino a pensar en el futuro”, expresó la también senadora, quien aclaró que más que pedir perdón por los errores anteriores, los priistas tienen que mostrar diariamente que son una oposición crítica, pero capaz de construir y, sobre todo, que son intachables.
Del mismo modo que ocurrió tras la derrota presidencial del año 2000, cuando las bases eligieron a Roberto Madrazo y a Elba Esther Gordillo para la dirigencia nacional, el tricolor abrirá sus procesos internos para que la militancia sea la que tome la decisión sobre sus próximos líderes.
La actual presidenta del Revolucionario Institucional explicó esto como la determinación del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de democratizar la elección de la presidencia del partido.
“Para la renovación de dirigencia, toda la convicción del CEN, mía como presidenta, de Arturo Zamora (secretario general), de todo el equipo, es de continuar con esta línea, abrir el partido a que la militancia tome las decisiones. Vamos a elegir una nueva dirigencia mediante un método democrático de participación directa de los priistas, emitiendo su voto para definir quién va a dirigir el partido los próximos cuatro años”, manifestó.
“Los militantes todos representamos al partido y uno de los reclamos que la propia militancia y la ciudadanía le ha hecho al Revolucionario Institucional, y se expresó el pasado 1 de julio (de 2018), fue que tenemos el deber de comportarnos con un nivel de intachabilidad para que el partido se vea proyectado y reflejado en todos sus militantes”, puntualizó la legisladora.
Entrevistada en la sede nacional del PRI, en el Salón Presidentes, donde se ubican los retratos de los dirigentes del partido, reconoció que uno de los principales reclamos de los militantes es democratizar la toma de decisiones, que se ha concentrado en la cúpula.
Para ello, al tiempo que se lleva a cabo el proceso de refrendo de militancia de los priistas y su credencialización, en apego a lo que requiere el Instituto Nacional Electoral (INE) a todos los partidos, el tricolor realizará su proceso interno para renovar la dirigencia en el verano, pues su liderazgo concluye en agosto próximo.
La presidenta nacional del tricolor indicó que todavía no definen si pedirán apoyo al INE para organizar la elección interna, pero aseguró que buscarán la mejor forma de que se lleve a cabo.
La intención, aseguró, es “darle certidumbre a quienes quieran participar de que hay claridad en las reglas y de que la organización será lo más transparente y de lo más pulcra, para que los priistas sepamos que nuestro voto contó y que es el de la mayoría del priismo el que le dará el triunfo y la legitimidad a una futura dirigencia para estar al frente del partido los próximos cuatro años”.
Con el peso del partido en sus manos, dijo tener claro que si en las décadas anteriores fueron un partido de masas, en adelante buscarán “ser un partido de ciudadanos, que son más exigentes y participativos”.